El PNV irrumpe en la campaña al rescate de la vieja Convergència
▶ Defiende el «realismo» del PDECat frente al inútil «todo o nada» de Junts y Puigdemont
El PNV ha entrado de lleno en la campaña catalana al rescate de la vieja Convergència que tiene sus huesos en el PDECat. El partido vasco, que rompió amarras con Carles Puigdemont tras la estrategia suicida de otoño de 2017, intenta ayudar a reflotar las expectativas electorales del independentismo no unilateralista con dos objetivos claros: sacar a Cataluña de la crisis institucional y sumar en un bloque político distinto al de ERC y Bildu en el Congreso. Las encuestas, sin embargo, apuntan a que los neoconvergentes apiñados en torno a la figura de Artur Mas sufrirán para llegar al Parlament.
Dentro del muy fragmentado tablero soberanista, el PDECat busca reconectar con el catalanismo harto de aventuras a ninguna parte y preocupado por la gestión de las cosas del comer. Aun consciente de su extrema debilidad, el líder del PNV, Andoni Ortuzar, dio ayer una charla telemática con su candidata a la Generalitat, Àngels Chacón, apostando para el 14-F. No tienen previsto participar en más actos. El Partido Nacionalista de Catalunya, que Marta Pascal creó a imagen y semejanza del PNV, no les ha pedido ayuda en la campaña, aunque Sabin Etxea no descarta su apoyo si les llaman.
«El ejemplo» vasco
Fue una lección sobre utilidad política. La vieja CiU mirándose nostálgica en el espejo del «partido hermano» vasco, su modelo de éxito. El PNV gobierna hoy todas las instituciones vascas y ejerce influencia ante el Gobierno central, mientras que del partido de Jordi Pujol solo quedan los restos. «El PNV es el ejemplo del buen gobierno que queremos recuperar para Cataluña», dijo la cabeza electoral del PDECat tras acusar a
JpC de no tener programa más allá de la secesión. La lista de Puigdemont ha anunciado que volverá a proclamar la independencia tras el 14F si el bloque separatista supera el 50 por ciento de los votos. Chacón recriminó que se lance otro órdago sin explicar cómo lograr la meta: «Son declaraciones frívolas, demagógicas y simplistas».
Aunque hasta ahora habían optado por no tomar partido en el avispero catalán, Ortuzar defendió ayer la receta del «realismo político» que encarnaría el PDECat en Cataluña frente a la confrontación que exhibe Junts, al que también dijo «respetar». En política, por si acaso, nunca hay que volar puentes, opinan en Sabin Etxea.
«El debate de la independencia a todo o nada suele acabar en nada», insistió Ortuzar, enmendando la estrategia rupturista. Lo que recomienda el PNV a los partidos soberanistas catalanes es recuperar cuanto antes el autogobierno mientras no sea posible la ruptura con España. Amasar todo el poder de camino a Ítaca. «El buen gobierno no es compatible con la confrontación», repitió Ortuzar señalando que hasta Bildu se ha dado cuenta de que gana más con Sánchez que en la barricada. Pero claro, frente a ERC y Otegui haciendo piña con Pablo Iglesias, el PNV busca socio catalán que hable su idioma, que comparta moderlo socioeconómico.
Según Ortuzar, el PDECat debe ejercer de «partido revulsivo» para fomentar un «modelo económico productivo» ante el reparto de los fondos europeos. Chacón, que fue consejera de Empresa y acabó expulsada por Quim Torra, acusa al Govern de situarse en el «extremismo» y «desprestigiar» las instituciones catalanas: «Nos dáis envidia, Andoni».
Ortuzar ofreció los votos del PNV para una amnistía que «puede ser perfectamente posible», dijo regalándole los oídos a sus interlocutores.