Las pymes sufrirían pérdidas de 1.800 millones a la semana
▶ Los puestos de trabajo afectados aumentarían en 482.000, según Ceprede
Otro confinamiento estricto de la población con el consiguiente parón de la actividad generaría aún más pérdidas millonarias para las empresas españolas. El impacto de congelar la economía para frenar la tercera ola de la pandemia ascendería a un agujero de 1.800 millones de euros semanales, de los cuales 1.100 millones corresponderían a las pequeñas y medianas empresas, según cálculos del Centro de Predicción Económica (Ceprede) presentado ayer por la Confederación Española de Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme).
«Las pymes absorberían el 60% de esta caída, ya que los sectores que en mayor medida sufrirían estas pérdidas son aquellos en los que la pequeña y mediana empresa tiene una presencia diferencial más alta», alertó el director general adjunto de Ceprede, Julián Pérez, durante la presentación del informe. La caída de la facturación aumentaría así en un 40% respecto a diciembre del año pasado, cuando se contabilizaron unas pérdidas de 1.200 millones por semana, y perjudicaría más a las compañías vinculadas a los sectores de la construcción, hostelería, comercio mayorista, comercio minorista, inmobiliarias, automoción y transporte terrestre.
En detalle, el director general adjunto de Ceprede advirtió de que si pasamos otra vez a una situación parecida a la vivida durante el primer estado de alarma, se produciría un deterioro adicional medio de la facturación del 4,2% para las compañías respecto a finales del ejercicio pasado. Como resultado, si la caída media de facturación a cierre de diciembre pasado se encuadraba en un 9,8% cuando ya había numerosas restricciones, con un nuevo encierro se incrementaría este desplome hasta el 14%. Las compañías más afectadas, que se dejarían de un 15 a un 20% adicional, serían las vinculadas al transporte aéreo, agencias de viajes o hostelería, entre otras vinculadas al turismo. No obstante, las empresas se han ido adaptando y sobreviviendo a las restricciones y la caída de la facturación media sería menor a la del pasado abril, cuando se alcanzó casi un 30%.
En términos de empleo, Pérez remarcó que unos 750.000 trabajadores siguen bajo el paraguas de un ERTE y