ENCIERRO EN LA UNIVERSIDAD DE LÉRIDA Pablo Hasél se resiste a su ingreso en prisión
«Estoy encerrado junto a bastantes solidarios en la Universitat de Lleida, tendrán que reventarla para detenerme y encarcelarme». Con este mensaje colgado en las redes sociales, el rapero Pablo Hasél anunciaba ayer por la mañana que se encerraba en el rectorado de la citada universidad con objeto de impedir que se ejecute la orden de ingreso en prisión dictada por la Audiencia Nacional el 28 de enero.
Ayer mismo, se desestimaba el recurso de súplica y, al cierre de esta edición, Hasél seguía dentro de las instalaciones junto a varias decenas de personas, a la espera de un desalojo que se esperaba que fuese inminente
El rapero debe cumplir la pena de nueve meses y un día que le impuso Tribunal Supremo por los delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias contra la Corona y las instituciones del Estado. Los magistrados rechazaron la petición de la defensa de suspender la pena y le dieron un plazo de 10 días para presentarse de forma voluntaria en un centro penitenciario, término que concluía el pasado viernes a las ocho de la tarde.
Ayer a última hora el rapero aseguraba que el rector de la universidad había autorizado a los Mossos a entrar, algo que desde el centro se negó que fuese necesario para que la policía actuase. Ya el pasado 12 de febrero, Hasél explicó que no pensaba acudir por su propio pie a un centro penitenciario, y que deberían ir a buscarlo. Coincidiendo con este episodio, el Gobierno anunció una reforma legal para eliminar las penas de cárcel en delitos de opinión.