Graves disturbios en Barcelona y otras ciudades en protesta por la detención
Tiendas y bancos asaltados y quema de contenedores por el arresto de Hasel ▶
Asalto a oficinas bancarias, contenedores ardiendo, enfrentamientos entre manifestantes y Mossos d’Esquadra por las calles del centro de Barcelona... El fantasma del otoño de 2019 reapareció ayer en Barcelona con una nueva jornada de disturbios y altercados que sembró el caos en el centro de la ciudad y se extendió a otros ciudades catalanas y a Valencia. En esta ocasión, el detonante fueron varias manifestaciones convocadas para protestar por el encarcelamiento del rapero Pablo Hasel y que degenaron en graves incidentes. Hasel, condenado por la Audiencia Nacional a dos años, cuatro meses y 15 días de cárcel por los delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona, ingresó ayer en prisión tras ser desalojado por los Mossos de la Universidad de Lérida, donde se había atrincherado.
En Barcelona más de un millar de personas se reunieron en la plaza Lesseps, ante lo que los Mossos y la Guardia Urbana desplegaron un amplísimo operativo centrado en defender posibles objetivos de los manifestantes, como la Delegación del Gobierno
En 2018 la Audiencia Nacional le condenó a dos años de cárcel por enaltecer a ETA, al Grapo e injuriar al Estado. No lo hizo en sus canciones, sino en Twitter. Luego, se le rebajaría la pena a nueve meses de cárcel por estar disueltos ETA y el Grapo.
El fallo que esquivó
En 2014, la AN le sentenció a dos años de cárcel por una decena de canciones que exaltaban a ETA, Grapo, Al Qaeda, el RAF y Terra Lliure. Les instaba a atentar: «No me da pena tu tiro en la nuca, pepero», decía en un verso.
Agresión a periodistas
En 2006, le cayeron seis meses de cárcel por agredir a un periodista de TV3 y dos años y medio por pegar a un testigo.
o la Fiscalía. Con el paso de las horas la marcha fue calentándose y a las nueve de la noche eran habituales las escenas de encapuchados reventando escaparates y sucursales bancarias a pedradas y prendiendo fuego a contenedores. Durante la manifestación, al menos una joven resultó herida en un ojo por lo que, según algunas fuentes, podía haber sido el disparo de una pelota de foam de los Mossos.
«Rabia, rabia, rabia», era una de las frases coreadas por los concentrados que en algún momento se ensañaron también con la prensa lanzando arena y otros objetos. A las 21.15 el Paseo de Gracia de Barcelona presentaba, de nuevo, el aspecto de caos y fuego propio de las últimas manifestaciones antisistema, con decenas de encapuchados quemando contenedores, rompiendo mobiliario urbano y ensañándose con los escaparates. Los disturbios se extendieron por el centro de la ciudad y al menos cuatro oficinas bancarias fueron asaltadas en la zona del Ensanche. Del mismo modo, en la zona baja de la calle Gran de Gracia grupos de encapuchados se dedicaron a saquear comercios y a hostigar a los antidisturbios lanzando objetos de todo tipo desde detrás de las barricadas que ar