ABC (Castilla y León)

La Junta planifica una desescalad­a que no concluirá al menos hasta finales de abril

▶ Comenzará el próximo lunes si los críticos en UCI no superan el 35% en el conjunto de Castilla y León ▶ Los alivios se harán por provincias y cada fase durará como mínimo dos semanas Realizar la vacunación masiva requiere 150.000 dosis a la semana

- ISABEL JIMENO VALLADOLID I. J. VALLADOLID

Habrá que esperar, al menos una semana más, para ver un alivio en las restriccio­nes vigentes en Castilla y León para contener el avance del Covid-19. Así lo acordó ayer la Junta en una reunión extraordin­aria del Consejo de Gobierno en la que se decidió no levantar medidas ni siquiera en las provincias como Ávila en las que sus indicadore­s epidemioló­gicos dejaron hace días el riesgo «muy alto» y sus UCI están por debajo de un 25% de ocupación de pacientes con coronaviru­s –el tope acordado para contar con un colchón en caso de rebrote–. Para poder dar el primer paso, las unidades de cuidados intensivos del Conjunto de la Comunidad –cuyos hospitales siguen trabajando «en red»– no deben tener ocupadas más de «en torno al 35%» de sus camas extendidas por otros espacios, según el porcentaje tope acordado. Ayer había 220 críticos con coronaviru­s para las 540 camas habilitada­s (40%), y ese máximo fijado supone que el tope deberá rondar los 190.

El próximo lunes habrá una nueva reunión del Consejo de Gobierno en la que se acordarán esas medidas. Eso sí, se ceñirán a levantar las restriccio­nes a mayores acordadas por la Junta para el nivel 4 de alerta sobre cierre de la hostelería en interior, gimnasios y grandes centros comerciale­s.

Soria, 80% cepa británica

Posteriorm­ente, ya sí se pasará a una desescalad­a por provincias, tal y como avanzó el viernes la Junta a los representa­ntes de esos tres sectores más afectados. Y la ocupación de las unidades de intensivos también será clave. «Se avanzará siempre que tenga capacidad de respuesta» y los pacientes contagiado­s por SARS-CoV-2 no superen el 25% de camas UCI, además de que el virus presente una tendencia sostenida o a la baja en su incidencia, señaló el vicepresid­ente y portavoz, Francisco Igea.

Si la situación sigue avanzando como hasta ahora, la previsión es que el próximo lunes «todas» las provincias –salvo

que en alguna la incidencia supere los 400 casos por 100.000 habitantes, situación en la que está Soria, donde el 80% de los nuevos positivos son de la cepa británica– puedan pasar a nivel 4 sin medidas adicionale­s. Supondrá que, a partir de ese momento, el propio lunes, bares, cafeterías y restaurant­es puedan abrir y atender clientes en el interior, pero a un tercio de su aforo; mismo tope que para la vuelta a la actividad en los gimnasios y la reapertura de los grandes centros comerciale­s.

Y así estarán al menos dos semanas, pues «no» se avanzará más rápido y la idea es «no andar dando saltos de manera alocada». «Nadie pasará del nivel 4 al 2 porque tenga mejores

Poder llevar a cabo una vacunación masiva contra el Covid-19 requiere que se reciban semanalmen­te al menos 150.000 dosis. Así lo apuntó ayer la consejera de Sanidad, Verónica Casado, quien precisó que, por ahora, con el nivel de envíos de las tres farmacéuti­cas autorizada­s es suficiente­s con el personal de Atención Primaria y los equipos hospitalar­ios itinerante­s niveles de incidencia», subrayó Igea. Se habrá de pasar «por todos y cada uno de los escalones» del descenso y estar en él catorce días. «Bajar despacio, lentamente» y «con prudencia» para «dar seguridad», y pendientes de los datos epidemioló­gicos y sanitarios marca el plan de la Junta para ir diciendo adiós a las restriccio­nes en un calendario diseñado «para los próximos meses». Según ese planteamie­nto, como mínimo, restan nueve semanas hasta volver a la llamada nueva normalidad, que en el mejor de los casos llegaría a finales de abril –el estado de alarma rige hasta el 9 de mayo–.

Para arrancar en «todas» las provincias, el nivel 4 estará en vigor al menos que están administra­ndo el fármaco.

Está previsto que esta semana lleguen a la Comunidad 70.610 dosis –menos de la mitad de las que requiere una inoculació­n masiva, cuyo plan diseña la Junta– entre las que remita Pfizer-BioNTech (38.610 unidades), Moderna (13.800), y AstraZenec­a-Universida­d de Oxford, (18.200). Hasta el momento, han llegado 323.070, se han hasta el 22 de marzo. De ahí, al 3 para las provincias en las que los críticos con coronaviru­s no ocupen más de una de cada cuatro camas UCI. Por ahora, sólo Ávila cumple este requisito, con intensivos al 22% de pacientes Covid. La siguiente más próxima es Salamanca, donde superan ligerament­e el 28% a tres semanas de poder avanzar a ese nivel que amplía aforos en hostelería al 50% si el local supera las 40 plazas y al 75 si no llega.

La siguiente revisión, superadas esas dos semanas, sería el 5 de abril, pasada ya la Semana Santa, por lo que en el mejor escenario algunos locales podrían llegar a recibir a la mitad de los clientes en esas fechas. Un perioadmin­istrado 257.493 y ya hay 89.941 personas que han completado el ciclo –el 85% de quienes están en una residencia ya han recibido los dos pinchazos, también el 73% de los trabajador­es sociosanit­arios y el 26 de los más de 70.000 sanitarios públicos y privados–.

Por otra parte, y respecto al posible pasaporte de vacunación, mientras el portavoz, Francisco Igea, señaló que «es más importante que lleguen antes las vacunas» que ese certificad­o, Casado garantizó que a través de la aplicación SacylConec­ta «toda la población de Castilla y León» puede hacer constar las vacunas que ha recibido, incluida la del Covid-19.

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F. HERAS El vicepresid­ente y portavoz, Francisco Igea, y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, ayer tras el Consejo

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