Abc.es/play
magia de la animación también hace que vuelva a resucitar Peter Cushing, que recupera su Moff Tarkin y juega un papel importante en el devenir de este grupo de inadaptados. Y, a falta de un Grogu, tienen a Omega, que promete hacer las delicias de los fans y con quien el líder de este lote malo crea un vínculo especial.
Toda la información en
Una serie sucesora
Todo ello, ingredientes para una receta de éxito. «La salsa secreta de Star Wars es que no puedes tener una gran película o serie sin que tenga corazón», reconoce la guionista, para quien lo mejor de este universo es su magnitud, que la dota de infinitas posibilidades. «Se pueden contar historias desde varias líneas de tiempo y diferentes perspectivas. No siempre se trata de Jedi, clones o senadores», asegura. «Al ser una serie sucesora, intentamos estar a la altura de esos estándares, pero es una galaxia diferente en este momento y la guerra ha terminado. Las cosas han cambiado», avanza Corbett.
Como soldados, nunca se habían posicionado políticamente, se limitaban a cumplir sus misiones. Pero el cambio de orden en la galaxia, y sus características diferencias con el resto de clones, provoca que empiecen a sospechar del Imperio. «Nunca cuestionaban nada y, de repente, sienten que algo va mal. ¿Pueden ser parte de eso? ¿Qué significa esa lucha para ellos? Todavía no se está produciendo una rebelión, y ellos intentan encontrar su lugar en la galaxia, en un momento de tanta inquietud e incertidumbre en el que su prioridad, aparentemente, es sobrevivir», aclara Corbett.