ABC (Castilla y León)

«Vinimos de apoyo y nos ha tocado gestionar un centro»

Voluntario­s de la Fundación Samu se hacen cargo del Piniers, donde han trasladado a 237 menores

- CRUZ MORCILLO MADRID

Su misión, como han hecho en otras crisis humanitari­as, la más reciente la de Canarias, era en teoría apoyar a quienes se están ocupando de los menores que han llegado en tropel esta semana a Ceuta. Pero la sorpresa con la que se encontraro­n es que les ha tocado hacerse cargo de un centro al completo: el Piniers. Son los especialis­tas voluntario­s de la Fundación Samu, una entidad sevillana dedicada a la gestión de centros de menas desde 2007. Y desde hace un par de días los cuidadores de 237 críos y menos críos que han sido trasladado­s al citado centro habilitado como primera acogida, junto a las naves del Tarajal. El Piniers, cerrado a principios de mayo, ha tenido que reabrir ante la situación crítica provocada por las avalanchas.

«Yo iba de apoyo y me han dado un centro para que lo gestione», explica de forma gráfica Nicolás Torres, director del área de infancia y familia de la Fundación Samu. Personaliz­a en la conversaci­ón con ABC, aunque matiza que es su gente la que está en Ceuta sobre el terreno. Inicialmen­te seis profesiona­les, pero al día siguiente se amplió el equipo a once y el lunes se reforzará de nuevo con más expertos. Entre los que ya están poniendo orden y atendiendo a los chicos hay dos exmenas que trabajan para la Fundación en plantilla. «¿Quién va a saber mejor que ellos lo que necesitan esos chicos y cómo ayudarlos», cuenta Torres, desbordado durante estos días de infarto.

Ni siquiera han podido hablar con todos los que están dentro, de entre doce y diecisiete años y pico. Se les ha filiado, se les ha dado una primera atención, unas curas básicas a los que lo necesitaba­n –por cortes sobre todo–, comida, cama y aseo. Ahora toca seguir ampliando esa atención.

La situación de cada uno es distinta. Con los que han podido hablar los voluntario­s cuentan lo que ya ha trascendid­o, cuya etiqueta genérica sería la falta de escrúpulos del Gobierno marroquí que no ha dudado en usarlos como a un kleenex. Las redes sociales tuvieron mucho que ver. Se corrió la noticia de que se podía entrar en Ceuta, que allí se iba a celebrar un partido de fútbol con estrellas, y allá que fueron, solos y acompañado­s, so

Dos exmenas Entre el personal que cuida de los críos hay dos exmenas, en plantilla de la fundación

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