Oreja para El Rafi y Salenc en el inicio de la campaña en Francia

Vuelven los toros a Francia. Por la mañana, brilla la novillera salmantina Raquel Martín. En la primera corrida de la temporada, en Arlés, toma la alternativa el francés El Rafi, que corta una oreja, igual que su compatriota Adrien Salenc. Daniel Luque lidia bien un mal lote. Los toros de Pedraza de Yeltes, altos, flaquean y dan escaso juego.

El coso arlesiano, como el de Nimes, es un anfiteatro romano, de forma elíptica (lo que complica las querencias), construido en el siglo I, a semejanza del Coliseo. Desde mediados del XIX, se dan en él corridas de toros. En 1888, Van Gogh pintó la llegada de los aficionados. Presenciar allí una corrida es un singular espectáculo.

Aunque Daniel Luque es, ahora mismo, uno de los diestros más en forma (como el tema musical de Glenn Miller),

sus dos toros le impiden esta vez el triunfo. El segundo, ‘Resistente’, resiste poco, flaquea y pega cabezazos. Consintiéndolo mucho, Luque le da la lidia adecuada, sacándole muletazos limpios, con técnica impecable. Mata con decisión pero falla con el descabello (palmas). Traza buenas verónicas en el cuarto, brusco, complicado. Muy firme, Luque logra muletazos con mérito y emoción, que el público no llega a apreciar. Mata a la tercera.

El nimeño Adrien Salenc tiene 24 años, se formó en la Escuela de El Juli y lleva dos años como matador. En el tercero, suelto y distraído, maneja con soltura los engaños y mata con habilidad: aviso y oreja. (Al apuntillarlo, sufre una cornada interna el banderillero Valladar). Lancea con gusto al quinto, que pelea bien en varas. Banderillea espectacular Marco Leal. El toro flaquea, es dócil, Adrien lo aprovecha con suaves muletazos hasta que la res se lesiona. Mata con facilidad.

También nació en Nimes, hace 21 años, Rafael Racaule ‘El Rafi’. Su abuelo trabajaba en los toriles, puede decirse que se crió en la plaza. En el primero, ‘Huracán’, noble pero renqueante, El Rafi está firme, en un trasteo deslucido por las caídas. No mata bien: aviso y cariñosa vuelta. El último repite y humilla. El Rafi liga muletazos voluntariosos por los dos lados. Estocada baja, el toro tarda en caer: dos avisos y generosa oreja. Francia tiene un nuevo matador de toros.