Mañueco manda a Sánchez «a su casa» al ser un «problema» para las personas
▶Acusa al presidente del Gobierno en las Cortes de generar «inseguridad, confusión, caos e incertidumbres» con su gestión de la pandemia
Pedro Sánchez pudo haber ocupado ayer el escaño número 82 para recibir los ataques que le dirigieron desde el Gobierno autonómico con su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, a la cabeza, que optó por tirar por elevación, por encima de su directo interlocutor, el portavoz del Grupo Socialista, Luis Tudanca. Las últimas encuestas que recogen el desgaste del Gobierno de España por la gestión de la pandemia ha hecho coger impulso al ejecutivo castellano y leonés que tiene muy claro cuál es el objetivo a batir para obtener resultados electorales. De ahí que en el pleno de ayer de las Cortes autonómicas, el presidente del Gobierno estuvo una y otra vez en boca de los consejeros, el vicepresidente y, por supuesto, el presidente de la Junta.
«Sánchez es un problema para las personas y según su doctrina (la de Tudanca), lo que tiene que hacer es marcharse cuanto antes para su casa». Así finalizó Mañueco su intervención para responder al portavoz socialista a su pregunta de si «considera que la Junta está transmitiendo la seguridad que necesita Castilla y León para su recuperación económica y social». Una interpelación que puso en bandeja a Mañueco, tras la decisión del Ministerio de Sanidad de retirar las restricciones de horarios y aforos por el Covid después de que la Audiencia Nacional las dejase en suspenso y una vez que comunidades como Castilla y León se negasen a cumplirlas. Así que el portavoz del PSOE orientó su pregunta hacia lo económico y, en concreto, hacia las «mentiras» de Mañueco, al que acusó de aportar cifras de ayudas superiores a las reales, según sus palabras, o decir que se van a reabrir los consultorios que, sin embargo, «siguen cerrados». «No le dice la verdad ni al médico», sentenció porque «ahora está convencido de la recuperación económica en la que usted no creía y da por terminada la crisis», le reprochó Tudanca, para advertir a continuación de que «no son capaces de hacer crecer esta comunidad
Tudanca acusa al Jefe del Ejecutivo autonómico de «mentir continuamente» y de «no decir la verdad ni al médico»
y ahora no van a aprovechar la gran oportunidad de los fondos europeos y sigue la corrupción campando a sus anchas».
Pero el presidente de la Junta tenía claro quien debía ser el objetivo de sus críticas y arrancó su intervención tachando a Tudanca de «representar el sanchismo más puro» y acusando a su Gobierno de generar «inseguridad, confusión y caos» con sus decisiones, como el «último capítulo» de las nuevas restricciones por el Covid. «¿Quién tendría que dimitir ahora?», preguntó Mañueco al portavoz socialista, a quien recordó que lo sucedido con la segunda dosis de AstraZeneca «es una moción de censura de la sociedad de Castilla y León a Sánchez». A ello sumó la incertidumbre que generan otros asuntos como las tarifas de la luz o los peajes. Horas antes, Alfonso Fernández Mañueco también realizó duras acusaciones antes del acto protagonizado por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en el que lamentó la «confusión e indefensión» a la que el presidente del Gobierno somete a los ciudadanos de «Sólo viene a meter ruido porque está cómodo detrás de su inmunidad». Así respondió el consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, al procurador de Podemos, Pablo Fernández, que quiso conocer si la Junta iba a mantener a Ignacio Cosidó en su puesto de asesor, pese a ser el «hacedor y muñidor de la deleznable, vomitiva y execrable operación Kitchen». Unas afirmaciones que llevaron a Ibáñez a recordar el «coscorrón» que recibió el dirigente de la formación morada al ser demandado por un delito de calumnias por sus comentarios contra Cosidó en un programa de televisión. Ibáñez informó de que en el acto de conciliación, Fernández se retractó de lo dicho porque «equivocó a Cosidó con otra persona» y aseguró «no tener información relativa de que haya estado, esté o pudiera estar investigado o condenado». este país, por lo que reclamó volver a la senda del entendimiento.
Fernández Mañueco intentó desmontar las denuncias del portavoz socialista y, así, se refirió a los 464 millones de euros de ayudas otorgadas a las empresas y autónomos afectados por la crisis del Covid, a los que añadió otros 550 en liquidez y «otros 200 pendientes de que el Gobierno abone el IVA pendiente». Además, advirtió al principal partido de la oposición de que «les escuecen las fotos con el Diálogo Social y les van a seguir escociendo», en referencia al reciente acuerdo para el empleo firmado con patronal y sindicatos.
El presidente de la Junta también encontró contestación a sus palabras en la siguiente intervención desde la bancada socialista, en la que Ana Sánchez le sugirió que sea él el que se marche ante la supuesta financiación irregular del PP de Salamanca y de que existe una caja B en el PP.
Precisamente, el mano a mano más intenso de la sesión plenaria lo protagonizaron la citada parlamentaria y el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, al que reprochó su «frivolidad e hipocresía» al tratar de tapar la corrupción, mientras que para éste, en el ejecutivo autonomómico «no hay un sólo caso» y, además, se trabaja para «prevenir y castigar esas conductas».