La OEA se reúne con Castillo para pedirle que espere con «paciencia» los resultados finales en Perú
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El Jurado Nacional de Elecciones (JNE) decidió ayer de modo unánime alargar los plazos para recibir todas las peticiones de nulidad de votos de la candidata Keiko Sofía Fujimori, quien busca obtener luz verde de la máxima instancia electoral y lograr la anulación de votos para superar la distancia de 59.753 que le lleva Pedro Castillo.
Mientras tanto, el presidente Francisco Sagasti solicitó a los candidatos Pedro Castillo y Keiko Sofía Fujimori que bajen las tensiones políticas y que reconozcan los resultados oficiales en un país partido en dos. «La tarea de un Jefe de Estado es hacer que el país mantenga la serenidad y la calma en momentos difíciles y complejos. En ese esfuerzo me puse en comunicación con varias personas que, entendía, tienen contacto con ambas candidaturas», indicó Sagasti tras revelarse que se comunicó con el Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, tras la segunda vuelta del pasado 6 de junio.
«Mi petición fue la misma para ambos: bajar la tensión y esperar los resultados oficiales. Una de esas personas (consultadas) fue Mario Vargas Llosa», dijo Sagasti. Por su parte, el ensayista e hijo mayor del escritor, Álvaro Vargas Llosa, dijo en RPP Noticias que «no hubo nada inconstitucional ni ilegal en la conversación de mi padre con el presidente Francisco Sagasti».
Al mismo tiempo, la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) se reunió ayer con el candidato presidencial Pedro Castillo, a quien pidió que espere los resultados de los comicios con «paciencia y serenidad», ante la ajustada diferencia que le separa de su rival, Keiko Fujimori, en lo que se ha convertido en un recuento agitado.
El jefe de la misión de observadores de la OEA en Perú, Rubén Ramírez, se reunió con el candidato de Perú Libre en el que fue el último encuentro de su ronda de conversaciones tras la tensión y crispación con la que se vive el recuento por parte de las autoridades electorales. En este proceso también mantuvo reuniones con Fujimori
y con el actual presidente, Francisco Sagasti.
El pasado miércoles, Keiko Sofía Fujimori solicitó a las autoridades electorales a través de un equipo de abogados que se anulen 802 actas de votación, que equivalen a 200.000 votos; de las cuales solo pudieron ingresar 212 actas debido a que las presentaron fuera de tiempo. Tras el aval del JNE podrán ingresar todas las actas que solicita Fujimori y que pertenecen a zonas andinas donde el voto de Castillo es mayor que el de ella.
Además, en un giro dramático en esta semana electoral, el fiscal José Domingo Pérez pidió la prisión preventiva contra Keiko Sofía Fujimori por violar las reglas de su libertad condicional al reunirse con un testigo del caso por lavado de activos, el excongresista, Miguel Torres. Dicha petición se evaluará en los próximos 30 días.
En una entrevista con ABC, la ministra de Defensa, Nuria Esparch, dijo que el papel de las Fuerzas Armadas durante las elecciones es «garantizar el libre ejercicio del derecho de sufragio, proteger a los funcionarios electorales y custodiar el material electoral. Durante la primera y la segunda vuelta se desplegaron más de 60.000 efectivos, quienes cumplieron cabalmente las tareas que la ley le encomienda a las Fuerzas Armadas». Según señaló la primera mujer que es ministra de Defensa en Perú, «es imprescindible que los miembros de nuestros institutos armados sean siempre respetuosos de la Constitución y de la voluntad ciudadana, para así defender la democracia que hoy vivimos y que tanto trabajo nos ha costado construir. Le puedo decir que las Fuerzas Armadas han aprendido del pasado».
Los resultados de la ONPE, escrutados todos los votos, muestran a un país partido en dos y en el que el dirigente izquierdista Pedro Castillo le ganó a Keiko Sofía Fujimori por menos de 60.000 votos. Mientras el bastión electoral del antiguo maestro rural se encuentra en los Andes y la selva amazónica, el de Keiko está en Lima, la capital, las ciudades costeras y fuera del país.