ABC (Castilla y León)

«Los indultos le van a costar muy caros a la izquierda»

▶ Regresa a la carretera con su gira ‘Volver para cantarlo’. Arranca este sábado en el Parador de Corias «Ver a políticos intentar aparentar que sabían más que los científico­s me ha dado mucha risa»

- NACHO SERRANO MADRID

No quería hacerlo hasta que el público se librara de las malditas mascarilla­s, pero Víctor Manuel ya no puede esperar más sin subirse a un escenario y regresa a la carretera con su gira ‘Volver para cantarlo’. Acompañado por su hijo David San José al piano y Ovidio López a la guitarra, dará doce recitales (unos con formato banda, otros en acústico) en los que explicará cada canción y recordará momentos de su vida.

—Con un poco de suerte, algunos conciertos ya serán sin mascarilla. —Sería estupendo, porque es algo que no soporto: ver a la gente con la mascarilla delante de mí. Si no hay más remedio, se hace. Pero ojalá todo esto acabe y por lo menos al aire libre ya se pueda empezar a prescindir de ella.

—Con su hijo ya tiene que tener una conexión musical tremenda.

—Es un tío que sabe muchísimo, y que además no te lo restriega por toda la cara (risas). A mí me viene muy bien, porque es como tener un guardián que no te deja pasar ni una. Cuando trabajas con él las cosas se tienen que hacer bien no, muy bien.

—De las anécdotas que cuenta sobre el escenario, ¿hay alguna con la que se emocione especialme­nte?

—Sí, sobre todo en los conciertos acústicos cuento muchas anécdotas, y me emociono mucho cuando cuento la historia de ‘María Coraje’, que es una canción muy antigua. Es una historia que le ocurrió a mi abuela, que era una auténtica María Coraje. Me cuesta mucho no llorar un poquitín. —También rinde homenaje a su abuelo. Qué buen nieto es usted.

—Soy muy familiar, y he cantado a abuelos, abuelas, padres, hijos, perros, gatos... le he cantado a todo lo que se moviera por la casa.

—Su nieto de seis años ya ha escrito su primera canción, he oído por ahí. —¡Sí! Es un chaval monísimo... ¡bah! para qué va a hablar su abuelo de él (risas). Cuando empezó el confinamie­nto, su padre le dio un acorde y se marcó una letra. Son sólo treinta segundos, pero resume lo que ha pasado.

—¿Le da miedo que su descendenc­ia siga sus pasos?

—Qué va. Eso me lo decían a mí cuando empezaba: «No hagas eso, estudia una carrera». Pero ahora le dices a cualquier chaval que estudie una carrera, y te responde que para qué, si luego no va a haber trabajo de lo suyo. Yo nunca he tenido miedo de que mis hijos sean artistas. Es una profesión maravillos­a.

—Nos va a marcar a todos, pero a la gente joven más. No es lo mismo quedarse en casa siendo mayor que un crío o un adolescent­e, que quiere salir y morder la vida. A mí no me extraña nada ver que a veces se desmadran, porque a mí me habría pasado lo mismo.

—¿Qué le ha parecido el comportami­ento de los políticos en el peor momento de nuestra historia reciente? —Ha sido bastante penoso. Ha habido gente que ha estado más a la altura, o que por lo menos se ha sabido callar a tiempo. Otros no han tenido ni siquiera esa prudencia, ni en los momentos en los que nadie ni los científico­s sabían exactament­e qué estaba pasando. Ver a políticos intentar aparentar que sabían más que los científico­s me ha dado mucha risa.

—Hace poco comentaba que a la ‘nueva izquierda’ le ha matado el no saber callar. Que se le ha ido la fuerza por la boca, vamos. ¿Cree que se ha peleado demasiado por cosas que no afectaban tanto a la vida de la gente?

—Sí. Eso pasa con toda la clase política. Se habla de lo que sea por el ego de aparecer en el escaparate. Pero si rascas un poquito ves que no hay nada debajo. Es como la obsesión de algunos artistas por hacerse la foto diaria para colgarla en las redes. Es la misma tontería. —¿Cree que los indultos le van a costar caros a la izquierda?

—Sí, eso seguro, le van a costar muy caros. Pero algo hay que hacer. Hay quien dirá que eso es entregarse en manos del separatism­o, pero creo que hay algo más detrás. Si hay una situación de bloqueo, ese es el camino para desbloquea­rla. Hay que hablar, poner las ideas encima de la mesa. Eso es hacer política.

—¿Le ve sentido vacunar a la selección de fútbol?

—Mi hija está en el teatro a diario con la mascarilla y no la vacunan. Es cierto que hay trabajos con gran responsabi­lidad social, y no pasa por la cabeza que no les vacunen. Si lo hubiesen hecho hace tiempo, quizá merecería la pena. Pero ahora, estamos dando un poco de vergüenza ajena, haciendo política casi viendo qué hacer en función de lo que piense la gente en los bares. En la política actual está muy de moda pasarle el papelón a la gente. ¡No! ¡Decide tú, que para eso cobras!

—Están reeditando sus discos de los setenta. ¿Habrá material inédito?

—No, es más bien una operación de rescate de discos que estaban fuera de circulació­n, descatalog­ados, de la época de Polygram. Fue una etapa muy irregular.

 ??  ?? —La pandemia va a marcar mucho a toda una generación.
—La pandemia va a marcar mucho a toda una generación.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain