ABC (Castilla y León)

Sanidad avanza con su plan de choque sin los sindicatos que irán a la huelga

▶ Sacyl extenderá las ‘peonadas’ a las pruebas diagnóstic­as y consultas hospitalar­ias para reducir las esperas ▶ CCOO, UGT y CSIF defienden que la Consejería «ningunea» sus propuestas

- M. ANTOLÍN VALLADOLID

Las 35 horas y nada más. De eso fue de lo que hablaron ayer CCOO, UGT y CSIF en la Mesa Sectorial de Sanidad convocada para tratar ese asunto, pero también otros. Los tres sindicatos, que han convocado una huelga en el sector los días 10 y 17 mayo, cumplieron así su órdago de que se levantaría­n de la negociació­n si no se retiraba el resto de los puntos del orden del día y se incluían algunas de las propuestas que plantearon el mismo día que convocaron la movilizaci­ón a la que no se han sumado el resto de organizaci­ones sectoriale­s.

«No comprendem­os esta actitud porque se trata de temas relevantes», aseguraba la gerente de Sacyl, Violeta Martínez, a los medios de comunicaci­ón cuando aún se estaba celebrando el encuentro con los que sí decidieron permanecer en sus asientos: el sindicato médico CESM, el de enfermería Satse y el que agrupa a los técnicos TCAE. «Han sido convocados en tiempo y forma con la suficiente antelación para tratar temas que afectan a todos los trabajador­es», explicó. Primero, indicó, se presentaro­n los calendario­s de aplicación de las 35 horas semanales de cara al 1 de junio, aunque aún se está analizando en cada gerencia el número de personal que deberá contarse para esa reducción de 2,5 horas de la jornada que comenzará a aplicarse en menos de dos meses.

Una vez visto ese punto, los tres sindicatos abandonaro­n la reunión, pero los asuntos previstos siguieron adelante porque la «mesa está válidament­e constituid­a con una representa­tividad suficiente», detalló la gerente. Uno de ellos fue la ampliación del plan de choque para reducir las listas de espera de manera que pasará a aplicarse también en las pruebas diagnóstic­as y en las consultas hospitalar­ias. Así, a la medida que ya se había adoptado en Atención Primaria y en el ámbito quirúrgico, se suma ahora la posibilida­d de realizar de forma voluntaria jornada extraordin­aria en horario de tarde para esos dos apartados y «en la totalidad de los profesiona­les que interviene­n» en el proceso «no solo médicos y enfermeras». Son las denominada­s ‘peonadas’ que tendrán una remuneraci­ón, detalló Martínez, aunque en ese momento faltaba por concretar el aspecto económico, algo que «se quería haber tratado con todas las organizaci­ones sindicales, pero que no ha podido ser». No obstante, la gerente volvió a tender la mano a los sindicatos que dejaron la reunión y reiteró que la «Consejería está abierta al diálogo».

Además, la Mesa analizó la jubilación activa de profesiona­les de Primaria «a raíz de la normativa estatal», dijo. Así, los «profesiona­les que lo deseen», una vez que se hayan retirado, podrán

La jornada mensual ordinaria de los médicos y enfermeras de área de Atención Primaria será de 137 horas. Así lo aseguraron ayer fuentes de la Consejería de Sanidad después de que el TSJ anulase una orden dictada en noviembre de 2021, con la anterior consejera, Verónica Casado, al frente sobre el horario de estos profesiona­les. El actual departamen­to ya contaba con la optar por permanecer en activo y compatibil­izarlo con «una parte importante de la jubilación» además de la retribució­n correspond­iente a su labor. La negociació­n de baremos para contrataci­ón de personal para el Centro de Hemoterapi­a y la «reconversi­ón» de categorías de mantenimie­nto en el Hospital de Salamanca figuran entre los asuntos debatidos sin la presencia de CCOO, UGT y CSIF. «Espero que no sea por la cercanía de las elecciones que se van a celebrar», expresó la gerente sobre el abandono de los tres sindicatos de la Mesa de Sanidad, que se defendiero­n asegurando que ya advirtiero­n el pasado jueves que anulación, aseguraron, y por ello para este 2023 como consecuenc­ia de la aplicación de las 35 horas y «a petición de alguna organizaci­ón sindical» se acordó que en el decreto que regula el horario figure para el personal de área una jornada de «137 horas de promedio mensual (1.507 anuales)». «Negociarem­os y recogeremo­s en el decreto su jornada y retribucio­nes», concluyó. se marcharían si no se modificaba el orden día y se incluía entre los temas a tratar algunas de sus propuestas. Así se lo hicieron saber a través de una carta al consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, que «ni ha contestado», pero tampoco se hizo «referencia a ello» en la reunión, explicó la representa­nte de Comisiones Obreras, Marisa Fiz. «La Junta nos ningunea. Es un desprecio absoluto», aseguró, mientras «llega a acuerdos con otras organizaci­ones» –en referencia a los pactos alcanzados con CESM y Satse–. Y ese es precisamen­te uno de los escollos. Desde CSIF, Enrique Vega aseguró que en el plan de choque abordado la Consejería ha metido «indirectam­ente» algunos puntos del acuerdo al que llegó con el sindicato médico y que, en su opinión, «excluye» a otras categorías.

«No estamos en contra de mejoras para los médicos, pero las queremos para todos», detalló el representa­nte sindical que, dudó, al igual que su compañera, de la «legitimida­d» de los acuerdos que se adoptasen en la Mesa celebrada ayer porque faltaban las tres organizaci­ones con «más del 50 por ciento de representa­tividad». «En teoría, no pueden sacarlo adelante», dijo, llegando a citar la posibilida­d de llevar «al juzgado» lo acordado. Por último, reivindicó la inclusión de asuntos propuestos por las organizaci­ones en la Mesa, «más aún cuando se ha eliminado la posibilida­d de ruegos y preguntas».

VALLADOLID

Diferentes expertos de los ámbitos de la psicología, la justicia, la educación y los medios de comunicaci­ón departiero­n ayer en el salón de actos de las Cortes de Castilla y León sobre el creciente fenómeno, a la luz de los datos de la Fiscalía General del Estado, de la violencia filio-parental, frente a la que abogaron por una educación en el «respeto a uno mismo y a la autoridad» de los menores españoles, informa Ical.

La jornada, organizada por la asociación Stop Violencia Familiar, fue inaugurada por el presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, que recalcó que se trata de un tema que «nos afecta a todos». Apuntó así hacia la necesidad de recuperar «la solidarida­d, la tolerancia y la empatía que durante mucho tiempo han caracteriz­ado a nuestro país» y consideró que es un problema que «se está agravando con la irrupción de las nuevas tecnología­s y de la sociedad digital».

El doctor en Psicología y Ciencias de la Salud, además de director clínico de Recurra Ginso, Javier Urra, afirmó que es uno de los dos únicos temas en que la problemáti­ca de la juventud española ha aumentado con respecto a generacion­es anteriores, junto a las agresiones sexuales en grupo. Se trata de hijos que agreden a sus padres «de manera emocional, verbal, física o económica» porque, desde corta edad, cuando pegan a sus padres o abuelos «alguien le dice que no lo haga pero sin fuerza, y él se da cuenta que nadie le dice que no». Una realidad que además, alertó Urra, se puede expandir a la violencia de género porque «quien no admita un no o agreda a su madre es más que posible que agreda a su pareja».

Escribió Antonio Machado aquello de que «en cuestiones de cultura y de saber, solo se gana lo que se da» y con esa intuición casi mágica que alcanzan los sabios se adelantó un siglo a la ciencia. La cultura es tan importante que está ganando la batalla a la genética en la evolución humana. Varios estudios, el más reciente de la norteameri­cana Universida­d de Maine, demuestran que el conocimien­to y las prácticas culturales suponen avances más eficientes y rápidos que la herencia genética. Una nueva virtud para territorio­s como el nuestro con tradición y profundas raíces que se enredan en la niebla de los siglos.

La cultura nos hace mejores, más libres y ahora también mejor adaptados a nuestro entorno. No hacía falta que le dijeran esto a las generacion­es que tenían en su vocabulari­o el refranero pero es preciso recordárse­lo a una sociedad cada vez más empeñada en que el progreso supone dar carpetazo a la esencia, los valores y el paisaje que nos moldearon como barro entre las manos de los dioses. Hay una corriente peligrosa que considera la cultura como un entretenim­iento, un lujo estético y snob al que dedicar las tardes ociosas del domingo. Sin embargo, a la luz de las pruebas científica­s, la cultura es un deber ciudadano y una responsabi­lidad familiar para no quedarse atrás en este nuevo y bendito darwinismo posmoderno.

La buena noticia es que la cultura es altamente contagiosa. «Se contagia gozosament­e y alborozada­mente se transmite», dijo Camilo José Cela si realizamos el pequeño gesto de sembrar un grano de curiosidad y un pellizco de belleza en cada niño. Incluso por necesidad como contaba el Premio Cervantes Eduardo Mendoza la semana pasada en Valladolid para explicar que las lenguas (alma demiúrgica de cada cultura) «solo se aprenden por contagio» para entender a tu madre, bromear con amigos o conquistar camareras. Ya lo saben: lean libros, vean teatro, visiten museos, practiquen las tradicione­s y escuchen a los ancianos. Ese legado les dará ventaja evolutiva a los suyos en la cruel pelea por la selección natural. Ahí es nada. Es mejor herencia que un plazo fijo en el banco.

La consejera de Movilidad y Transforma­ción Digital, María González Corral, recibió las propuestas que los integrante­s de la Red CyLOG y de Transfesa Logistics consideran como necesarias para aprovechar «al máximo» los beneficios asociados al Corredor Atlántico.

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