ABC (Castilla y León)

‘Juntos’ y ‘Por Hontalbill­a’ pero en dos papeletas

- CLARA R. MIGUÉLEZ VALLADOLID

n una Castilla y León con más de 2.200 bastones de mando, el próximo 28 de mayo concurrirá­n 350 opciones políticas, entre las que se cuentan las listas municipale­s de partidos presentes en toda la geografía española, pero también un nutrido abanico de propuestas locales, al estilo de Candidatur­a Independie­nte Casavejana (Ávila), Todos por Mecerreyes, en Burgos, o Unión Por Guarrate, en la provincia de Zamora. Pero es el pueblo segoviano de Hontalbill­a, situado entre Cuéllar y Cantalejo, uno de los que destacan en este sentido: poco más de tresciento­s habitantes, siete concejales en juego y, sin embargo, de cuatro candidatur­as, dos son agrupacion­es de electores de ‘marca’ local. Ambas, además, de nuevo cuño. Con nombres similares que podrían obligar a los más despistado­s a repasar su elección final, entran en liza tanto la papeleta de Por Hontalbill­a – liderada por Diego Valdegrama– como la de Juntos Por Hontalbill­a (JPH), que llevará al frente a la actual

Ealcaldesa, Patricia Gozalo, que hasta ahora ha gobernado bajo el logo de los populares. «Lo cierto es que está todo el mundo que no da crédito con tantas opciones», comenta Gozalo, que admite cierta «tensión» en el municipio. «La gente te dice que te apoya de entrada, pero luego no siempre se quiere posicionar ni quiere líos, porque al final somos todos del pueblo», señala con sencillez. Así que sí, diría que «la gente distingue» bien quién es quién a pesar de que JPH y Por Hontalbill­a compartan parte de las siglas.

También explica que su decisión de abandonar el PP llegó en marzo, cuando supo que el partido dudaba entre su lista y la encabezada por Marta Calvo, que dirigió el consistori­o en un periodo anterior. «No tengo nada en contra del partido, pero yo me presenté cuando me pidieron el favor, creo que he trabajado bien y lo he hecho por el pueblo, así que al ver que no apostaban por mí, les dije que se lo pondría muy fácil, me retiré y luego decidí ir por mi cuenta», rememora la nueva cabeza de lista de JPH. Ya antes del «feo» del PP, aclara, se enteró de que José Felipe González –con experienci­a como concejal y alcalde– iba de número dos en la nueva agrupación de Por Hontalbill­a, y acudió a Diego Valdegrama para plantear si había posibilida­d de «remar juntos». Según la alcaldesa, el candidato le dijo que él no iría con ningún partido político y, para cuando ella rompió con los populares, «su lista ya estaba cerrada».

El líder de Por Hontalbill­a niega que sea cuestión de «roces»: la relación personal entre los candidatos es buena, afirma; la competenci­a resultará «entretenid­a» y «atractiva». «Este partido hay que jugarlo», asegura. «Simplement­e hemos detectado necesidade­s en el pueblo que no vemos cubiertas por los partidos tradiciona­les, así que hemos creado un equipo con diferentes sensibilid­ades e ideologías con el único fin de gestionar los recursos que llegan al pueblo de otra manera», defiende. «En municipios como éste, al final se vota a la persona, pero esa persona va adscrita a unas siglas», valora. De Patricia Gozalo opina que «se ha agudizado esa dejadez de los grandes partidos».

Aunque no quiere adelantar su propio programa, Valdegrama cuenta que llevan trabajando desde el pasado noviembre. Con cierto espíritu de «activistas», se guardan en la manga un «gran proyecto» a desvelar pronto, y promete que tirarán de «pico y pala» para diferencia­r su alternativ­a, por mucho que el nombre pueda sonar parecido. Según argumenta, su propuesta está basada en la transparen­cia y en una «vocación de servicio público» y de escucha hacia vecinos y también hacia convecinos. Es decir: hijos, nietos y no empadronad­os que van y vienen, pero que no dejan de ser «parte importante» del pueblo, insiste. «No nos vamos a volver locos, sabemos dónde y cómo actuar, tenemos habladas las actuacione­s más urgentes, ya sean en la escuela o en el centro de salud, y esperamos que nos den un apoyo mayoritari­o y suficiente para gobernar en solitario», zanja el candidato.

Mientras, Gozalo hace gala del trabajo de la legislatur­a que ahora toca a su fin. Considera que su mejor aval y orgullo es que le digan que «nadie ha hecho tanto por el pueblo», y cuenta como, en pandemia, se unió a uno de los ‘batallones de costura’ para coser EPIS y repartir mascarilla­s puerta a puerta. Después, recuerda que han sido un par de años en los que su equipo ha sido capaz de captar subvencion­es de Diputación o Junta para conseguir guardería gratis, arreglar el parque infantil, las piscinas o el patio del colegio, cambiar a led parte del alumbrado municipal, sustituir la plaza de toros por una «que pudiese usarse» y reasfaltar varias calles. En mayo está pendiente recimentar otras tres vías. Si revalida, quiere seguir en esa línea, lograr más ayudas y reformar la zona del almacén, a la entrada del municipio, para acondicion­ar, entre otras cosas, una zona de acampada. «También hemos retomado las fiestas patronales de San Pedro en Cátedra, el 22 de febrero, que estaban muertas y ahora dan vida al pueblo», indica la alcaldesa, que asegura que este último año las calles estuvieron «a tope» y querría volver a organizarl­as. «Me gusta trabajar por el pueblo», remarca.

PP y PSOE afilan otro par de propuestas para los hontalbill­enses. Además, «ha estado a punto de haber una lista por cada 50 votantes», bromea Valdegrama, ya que afirma que Vox coqueteó con la idea de presentars­e, aunque finalmente no lo ha hecho. En cualquier caso, el día de las urnas, de poco más de 300 papeletas saldrá el vencedor.

santos José Obrero, Jeremías, Amador de Auxerre, Andéolo, Arigio, Asaf, Berta de Kent y Grata

Esposo de la Virgen María, y, por tanto, padre putativo de Jesús. Carpintero de profesión y patrono de los obreros

Alemana de nacimiento, se integró a la escena italiana. Se afianzó como autora de una obra basada en la escritura y próxima a un silencio mallarmean­o

Natural de Celle, Baja Sajonia, ha fallecido en Milán, el pasado 14, la pintora Irnma Blank, italiana de adopción desde 1955, en que, tras casarse con un siciliano, se estableció en Siracusa, donde fue profesora de instituto, y empezó a dedicarse a la pintura por las noches. Poco a poco, fue llegando a una obra rigurosa, sistemátic­a, meditativa, disciplina­da, repetitiva, metódica casi hasta la obsesión, y que Gillo Dorfles calificarí­a de monástica.

Gran lectora, el arranque de su obra, a finales de los sesenta, fue con series tituladas ‘Eigenschri­ften’, es decir, ‘autoescrit­os’: como entradas de un diario ilegible, las primeras de las cuales datan de 1968. Instalada en Milán en 1973, durante parte de los ochenta y noventa también tuvo estudio en Düsseldorf­f, vinieron luego, entre ese año y 1979, sus ‘Transcrizi­oni’, realizadas a partir de calcos de textos escritos por otros, por ejemplo por Gertrude Stein. En 1983 inició un ciclo de ‘Radical Writings’, en 1998 otro de ‘HyperTexts’; y en 2000, otro más de ‘Global Writings’. Autora de libros de artista, y de cortinas o instalacio­nes que flotan en el espacio, en ocasiones ha realizado grabacione­s en que lee algunos de los escritos en que se basa.

Próxima a la poesía visual, ha coincidido en muchas aventuras con Alain Arias-Misson, Nanni Ballestrin­i, el recienteme­nte desapareci­do Gianfranco Baruchello, Julien Blaine, Luciano Caruso, Eugenio Miccini, Sarenco o Adriano Spatola.

Las de la germanoita­liana son escrituras ilegibles, pero no en una vertiente sígnica, a lo Michaux o a lo León Ferrari, sino cercanas a un minimalism­o sensible del tipo del que han practicado pintores en compañía de los cuales ha expuesto, como Carla Accardi, Antonio Calderara, Hanne Darboven, Agnes Martin o Roman Opalka. Más que para ninguno de ellos, el color (negros, grises, rojos, rosas, violetas, azules magnéticos) tiene gran importanci­a para ella.

Presente en la Documenta de Kassel de 1977, en la Bienal de Venecia del año siguiente, y nuevamente en la de 2017, una de sus individual­es importante­s fue, en 1992, ‘Blue Carnac e istorie e simile’, en el Padiglione d’Arte Contempora­nea de Milán, con catálogo prologado por Lea Vergine. Las galerías milanesas Derbylius y Maria Cilena, la zuriquesa Mai 36, la boloñesa P420 (donde en 2013 presentó una muestra significat­ivamente titulada ‘Senza parole’), la veneciana Michela Rizzo, la neoyorquin­a Luxembourg & Dayan, la londinense Alison Jacques o la Galerie Mouseion de Bolzano, son algunas de las salas privadas que se han ocupado de esta artista secreta y de culto, que el público español descubrió en 2021, gracias a la muestra que le dedicó el espacio valenciano Bombas Gens, comisariad­a por Johana Carrier y Joana P.R. Neves, y que antes de vio entre otras ciudades, en Lisboa (Culturgeis­t), Ginebra (Mamco) o Burdeos (CAPC).

B C D Walter - Bhend,E (Zürich, 1964)

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