Seguimos en campaña
Cuando faltan muy pocas horas para el comienzo de la campaña electoral, la realidad es que esa puesta de largo será un punto y seguido en la campaña permanente en la que estamos sumidos y lo malo es que el 28 de mayo no va a acabar, sino que se intensificará más ante la ‘madre de todas las batallas’, que no es otra que las legislativas de final de año.
En nuestra comunidad tocan solo elecciones municipales, con ese test abierto para ver, en ausencia de mayorías absolutas, qué alianzas se configuran y que pálpito da todo ello (y aquí entra en juego también lo que pase en el resto de los municipios y comunidades españolas) de cara a las inminentes generales.
Son elecciones municipales, lo que está en juego es el gobierno en los ayuntamientos y en las diputaciones en los próximos cuatro años, pero sería absurdo no pensar en que hay un trasfondo nacional al que colaboran infatigablemente los líderes de los partidos nacionales, que se están midiendo de cara a la convocatoria de diciembre. En nuestra comunidad la gran partida se juega en el Ayuntamiento de Valladolid, donde el PP aspira a desbancar al socialista Oscar Puente, que siempre ha mostrado seguridad en que repetirá mandato. Las encuestas que se conocen hasta el momento nos dicen que PSOE y PP están muy igualados en la intención de voto y que serán las fuerzas a derecha e izquierda las que decidan quién será el alcalde. Es, sin duda, el mayor aliciente de esta convocatoria en Castilla y León, cuyo resultado dependerá en buena medida de la capacidad de movilización del electorado. El candidato del PP, Jesús Julio Carnero, ya ha dicho que no va a confrontar, sino que se volcará en explicar la ciudad qué quiere y Oscar Puente, el actual alcalde, también ha señalado que no quiere una campaña bronca. Son dos candidatos que se conocen y se respetan y que pueden lograr, si mantienen sus posiciones actuales, todo lo contrario de lo que sucede en la vida nacional: crear un escenario electoral en el que cada parte se explique sin necesidad de la bronca permanente, centrados en lo que interesa a los ciudadanos y no en el combate cuerpo a cuerpo del que ya estamos tan hartos los ciudadanos.
El 28 de mayo saldremos de dudas y empezará la nueva y sin duda bronca campaña, aunque afortunadamente con la tregua del verano.