ABC (Castilla y León)

La economía crece «más de lo esperado» y cinco veces por encima de la UE

▶ Industria, Servicios y construcci­ón, claves en el incremento del 2,7% durante 2023 ▶ El descenso de la agricultur­a y el parón del consumo de los hogares impiden que el repunte sea mayor

- M. ANTOLÍN VALLADOLID

El año 2023 se saldó con un crecimient­o del 2,7 por ciento de la economía de Castilla y León. Un incremento inesperado, «mucho mayor del previsto», según reconoció ayer el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, quien subrayó, además, que supera en dos décimas la subida de la media nacional y es «cinco veces más» de lo registrado en la media de la Unión Europea. que se ‘conformó’ con un aumento de 0,5 puntos porcentual­es, Así lo aseguró el titular del departamen­to económico al dar a conocer los datos de contabilid­ad de todo el ejercicio, donde fueron, especialme­nte, la industria, los servicios y la construcci­ón los artífices de un registro que supera los cálculos realizados por la Junta que estimó un repunte de apenas el 1,6 por ciento.

Carriedo sí señaló que se trata de un ritmo menor que el anotado en 2021 y en 2022, los dos años marcados por la «recuperaci­ón» tras el hundimient­o por la pandemia y que devolviero­n el PIB a los niveles pre-Covid. Así, los datos del pasado ejercicio reflejan, dijo, un crecimient­o «neto» alejado ya de la epidemia y que permiten a la Comunidad seguir en la senda ascendente. Todo ello, insistió, basado en el «comportami­ento positivo» del sector industrial, que experiment­ó un alza del 3,8 por ciento; de los servicios –sobre todo del comercio y la hostelería–, con un incremento del 3,5 y la construcci­ón (3%). de la construcci­ón y la industria mientras que retrocedió en los servicios y en el sector primario.

En resumen, expresó Carriedo, se trata de un crecimient­o «importante» que está por encima de lo vivido en el entorno de la Comunidad y que no estaba dentro de las previsione­s del Gobierno autonómico. Todo, dijo, porque cuando se ultimaban los Presupuest­os para 2023 y la Junta hizo sus cálculos obre cómo evoluciona­rá la economía en los siguientes doce meses, Castilla y León se enfrentaba a un escenario de elevada inflación y a unos tipos de interés también al alza que, pese a todo, no han hecho que la compra de vivienda se resintiera ni ha hecho mella, por el momento, en la construcci­ón.

Tampoco la evolución de los precios ha tenido el impacto que se esperaba en el consumo de las familias, que crece a menor ritmo, pero ha conseguido no descender, aseguró. Eso, unido a que la región finalizó el año como la segunda con mayor índice de producción industrial, la primera en exportacio­nes y que ha sido un año «muy intenso» en cuanto a fondos europeos. En ese sentido, aseguró que la inyección del apoyo llegado de la UE para la recuperaci­ón y resilienci­a tras la pandemia alcanzaron el «nivel máximo» en 2023, algo que se refleja en los datos en el apartado del gastos de las Administra­ciones Públicas.

VALLADOLID

El Ayuntamien­to de Valladolid insistirá en modificar el convenio de la Sociedad Alta Velocidad para acometer el soterramie­nto porque «las condicione­s son óptimas». Así lo defendió ayer el alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero, que se comprometi­ó a «seguir luchando» por el proyecto al afirmar también que «cuantas más frecuencia­s haya de trenes en Valladolid, más necesidad hay de soterrar» porque «lo contrario es condenar a la ciudad».

Por ello, durante el pleno extraordin­ario convocado para debatir la moción socialista sobre si cumplir la integració­n ferroviari­a o disolver la Sociedad Valladolid Alta Velocidad, Carnero consideró que no es necesario este último punto porque la integració­n, iniciada durante el gobierno municipal de Óscar Puente, «no implica abandonar el soterramie­nto». «Podemos integrar, pero la integració­n nunca puede ser algo que vaya en contra de la posibilida­d de soterrar en un futuro», sostuvo el actual primer edil. Por último, hizo un llamamient­o a una posición común ante un «reto histórico» que «transforma­rá la ciudad».

Previament­e, la defensa ‘popular’ del soterramie­nto corrió a cargo del concejal de Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca, que se congratuló de la postura de 15 de las 16 asociacion­es personadas en el pleno para defender el proyecto municipal. «Hoy se ha caído un muro», apuntó, al hacer mención al «clamor ciudadano» que pide acabar con «otros dos muros: el del Ministerio, que no existía, y para lo que necesitamo­s unidad política, y el muro físico cuando se ejecute la obra», informa Ical.

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