Huchas de la ANC para mantener a Puigdemont
Los 75.000 euros de fianza que tuvo que pagar Carles Puigdemont para salir de la prisión de Nuemünster fueron aportados por la «caja de solidaridad» de la ANC, organización que ha organizado actos en Alemania donde se ve a voluntarios agitando huchas ante los presentes con las que piden dinero para «apoyar a los presos políticos».
Quizá gracias a todo ello puedan pagarse los entre 70-100 euros por noche que cuesta el apartahotel Adagio, en la calle Lietzengburgerstr 89 de Berlín, distrito de Charlotemburg, donde reside ahora el expresidente de Cataluña y con el que juega al despiste con los periodistas.
Puigdemont alterna esa dirección con la casa de un buen amigo instalado en la ciudad, en el que es agasajado con cenas y visitas como la de Artur Mas. Este fin de semana recibió a su mujer y a sus hijas y pudo disfrutar de unos soleados días en familia. Evitando a los fotógrafos, prescinde de paseos y terrazas, a pesar del buen tiempo. «Hasta que no nos digan, ese apartamento no se limpia, eso nos dijeron. Después vamos recibiendo instrucciones: ahora se limpia, y se envía a alguien que haga el servicio a la mayor rapidez», señala una de las trabajadoras que se ocupan de la limpieza del establecimiento.
Las dos personas que no se separan de él ni un momento y que organizan los detalles más domésticos son el empresario Josep María Matamala y la delegada de Cataluña en Alemania hasta la aplicación del 155, Maria Kapretz. Son ellos quienes se ocupan de la logística y los suministros, incluso las comunicaciones. Puigdemont se limita a hacer política.
Además de la entrevista concedida a TV3 y su actividad en las redes sociales, Puigdemont ha fijado en Berlín una agenda de contactos que le permite difundir su visión del conflicto de Cataluña a los más diversos niveles.