Rescatan una hembra de jabalí que cayó a un canal de riego
La Sociedad de Caza de Cartaya denuncia que mueren ahogados decenas de animales cada año
Cazadores de la Sociedad de Caza de Cartaya ( Huelva) rescataron el pasado 4 de abril una hembra de jabalí a punto de ahogarse en un canal de riego del municipio, donde denuncian que cada año caen y mueren decenas de animales silvestres de todo tipo.
Los hechos se produjeron cuando un ganadero de la zona de Arroyo Gordo observó como una hembra de jabalí agonizaba en un canal de riego propiedad de una comunidad de regantes del municipio. “Recibimos el aviso de este ganadero y, rápidamente, nos trasladamos tres miembros de la sociedad de caza para proceder al rescate” explica Fernando Villalobos, presidente de la Sociedad de Cartaya.
Pese a que la jabalina pudo ser recatada con vida en esta ocasión, los cazadores no siempre consiguen llegar a tiempo y aseguran que anualmente encuentran como mínimo entre 20 y 30 animales muertos en el canal de riego: “el problema - según explica Villalobos- es que el canal tiene una valla de un metro y tras ella hay una caída; los animales que, por cualquier motivo, saltan la valla no ven lo que hay detrás y caen en el canal”.
No es la primera vez que la Sociedad de Cazadores de Cartaya protagoniza el rescate de un animal a punto de ahogarse en este canal: hace algunos meses, durante el transcurso de una carrera de moun- tain bike que atravesaba la zona, varios animales huyeron asustados por el bullicio. En su huída, cayeron al canal de riego y hubo que realizar un importante despliegue para su rescate, según apuntan cazadores cartayeros, que junto con efectivos del 112 colaboraron en el rescate de los animales.
“Hemos recogido animales de todo tipo: ciervos y jabalíes sobre todo, pero también caen liebres, conejos y hasta, en alguna ocasión, nuestros propios perros” explica el presidente del colectivo cinegético cartayero, quien señala que ya han solicitado en numerosas ocasiones que, al menos, se duplique la altura de la valla para evitar que los animales caigan al canal.
“Con esta actuación, una vez más, la caza social demuestra que, más allá de los esterotipos y prejuicios vertidos interesadamente por ciertos colectivos desde la ignorancia, representa una actividad comprometida con la conservación, algo por lo que desde la Federación Andaluza de Caza felicitamos, en este caso, a la Sociedad de Cazadores de Cartaya” apunta José María Mancheño, presidente del organismo federado.
Ciervos, jabalíes, liebres y hasta perros de los propios cazadores son víctimas de una “trampa mortal”