Dos mil toneladas diarias de sal para descongelar media España
▶ Una salinera de Torrevieja dobla turnos de trabajo para asegurar el suministro Reparto para toda España
El principal proveedor de sal para el deshielo en carreteras en España, la compañía salinera de Torrevieja, ha triplicado en los últimos días el envío habitual para nevadas debido a la virulencia del temporal Filomena, con 2.000 toneladas diarias, cuando lo usual son entre 500 y 1.000.
Con el fin de asegurar este abastecimiento inusitado en el interior de la Península Ibérica por unas precipitaciones históricas, sobre todo, en Madrid, la empresa puso en marcha un segundo turno de trabajo y podría implantar un tercero si hubiera necesidad, según explicó ayer el director de la planta torrevejense del grupo internacional Salins, José Pérez.
«Para una nevada normal en España, se suelen consumir unas 20.000 toneladas y ahora se van a enviar entre 30.000 y 35.000, aunque no habrá ningún problema de suministro porque contamos con 150.000 en reserva en estos momentos», precisó el directivo. Esta actividad se notó el fin de semana con la estampa de colas de una decena de camiones en algunos momentos del día para cargar en estas instalaciones de extracción situadas junto al Parque Natural
de las Salinas de Torrevieja en la Laguna de La Mata, tal como relató el alcalde, Eduardo Dolón.
«Este temporal no les afecta, pero sí han tenido problemas en los dos últimos años, primero con la DANA y luego, sobre todo, con la borrasca Gloria, porque al llover mucho repercute en la salinidad del agua y les obligó a parar la producción», recordó.
Plantilla completa
A pesar de que la climatología condiciona esta actividad extractiva de sal marina, en este episodio de precipitaciones fuertes no se ha interrumpido en ningún momento porque en Torrevieja se dejó sentir sobre todo con fuertes vientos, no con lluvias ni tampoco –algo completamente inusual que solo ha ocurrido en contadas ocasiones– nieve. Pérez precisó que cuentan en la actualidad con su plantilla al completo, compuesta por 82 trabajadores, después de recurrir a un ERTE durante un par de meses en el otoño, paréntesis que concluyó en noviembre con la reincorporación de 29 empleados. Para atender los pedidos durante estos días, ese doble turno solo ha descansado un día a la semana, el domingo, pero en caso de que siga la demanda disparada por los estragos ocasionados por la borrasca Filomena, en Torrevieja pueden incrementar la producción.
De hecho, en un año normal comercializan 600.000 toneladas, si bien las instalaciones cuentan con capacidad para elevar esa cifra hasta 800.000. «Estamos entre los dos o tres mayores productores
Es la reserva de sal actual en la compañía Salins, que exporta un 80% a Europa y EE.UU. en un año normal europeos y los diez de todo el mundo, con plantas en varios países, por lo que no habría problema en desviar a clientes a otros proveedores de nuestro grupo», garantizó.
Por infraestructuras tampoco se pueden producir problemas, dado que aparte de en camiones, se puede transportar por vía marítima con cargas de 30.000 toneladas en barcos de sal. Por este canal pueden destinar el 80% de su volumen anual a la exportación, principalmente, a los países nórdicos en Europa y también a Estados Unidos. Acerca de una demanda similar a la actual en España, Pérez recordó ayer un momento puntual en el invierno de hace tres años.
Además de Salins, con sede central en Francia y que adquirió hace unos años la Nueva Compañía Arrendataria de Salinas de Torrevieja (NCAST), el Ministerio de Fomento y las comunidades autónomas cuentan con otro suministrador en el municipio zaragozano de Remolinos, donde está la compañía Ibérica de Sales, que explota una mina con capacidad para miles de toneladas diarias también.