Una macrolicitación pondrá en marcha más de 150 proyectos de depuración
▶La Junta quiere iniciar ya todos los estudios de ingeniería de las obras que se señalaron como prioritarias en 2010 para cumplir con las normas de la UE
El Gobierno andaluz quiere que 2021 sea el principio del fin de un déficit histórico, como es la depuración de aguas residuales en aglomeraciones urbanas, donde la carencia de las infraestructuras adecuadas ha provocado que la comunidad haya sido multada por la Unión Europea por incumplir desde hace décadas las directivas comunitarias. La Consejería de Agricultura y Desarrollo Sostenible lanzará en las próximas semanas un conjunto de licitaciones para realizar los estudios de ingeniería de más de 150 actuaciones de depuración en toda la región, que tendrá un presupuesto inicial que rondará entre los 15 y los 20 millones de euros.
«Daremos así el primer paso para materializar todas estas obras, ya que solo una vez que estén redactados los proyectos se podrían iniciar la construcción de los mismos», indica Sergio Arjona, director general de Infraestructuras del Agua. La gran meta es lograr que en un plazo aproximado de seis años la mayoría de estas obras estén construidas o en fase de desarrollo y finalización, lo que requerirá una inversión total cercana a los 500 millones de euros. «Tras más de diez años de abandono, ponemos así el reloj a funcionar», remarca.
En 2010 la Junta realizó un listado de obras hidráulicas calificadas de «interés para la Comunidad Autónoma» que debían lograr que Andalucía cumpliera con la directiva europea (que data de 1991). Se resolvería así un incumplimiento histórico de las normas comunitarias para evitar la contaminación de los ríos con un total 300 iniciativas (cada una de las cuales agrupaba, a su vez, varias actuaciones), pero la mayoría quedó finalmente en el olvido.
El objetivo ahora es «definir los proyectos de las más de 150 iniciativas sobre las que aún no se había hecho nada e impulsar el desarrollo de aquellas que aunque sí se iniciaron, estaban ahora estancadas por diversos motivos», apunta el director general.
La licitación saldrá a finales de enero o febrero y se estructurará en lotes que agruparán los proyectos por comarcas para darle la máxima agilidad. En el caso de todas estas obras la financiación está garantizada, ya que el denominado «canon de mejora» se instauró en 2010 precisamente para financiar todos estos proyectos. A través de la factura del agua la Junta de Andalucía recauda anualmente unos 140 millones de euros que solo pueden destinarse a obras de depuración (aunque desde 2019, tras una modificación normativa, también pueden orientarse a otras infraestructuras relacionadas con el ciclo integral del agua).
La realidad es que las arcas públicas han ingresado en torno a 600 millones de euros que aún deben invertirse en la mejora de las aguas residuales, a los que se sumará la recaudación de cada ejercicio en curso. «El objetivo debe ser utilizar el 100% del canon de mejora y recuperar el tiempo perdido cubriendo en los próximos seis años todo el déficit de inversión que hemos padecido hasta ahora», incide Sergio Arjona. La comunidad ha llegado a tener más de 300 aglomeraciones urbanas en riesgo de ser sancionada y «la meta es reducir esta cifra a cero».
Estas iniciativas representarán una de las mayores apuestas inversoras de la Junta. En plan «Andalucía en Marcha» que presentó el pasado otoño Juanma Moreno prevé movilizar más de 3.000 millones de euros. De ese importe, prácticamente un tercio (940 millones) se corresponde con infraestructuras hidráulicas. podemita de vocación y dejar entrever, de paso, su inconcebible vuelta a la vida pública, mientras suspira confiando en que el posible indulto a los golpistas catalanes —a los que el califica, «a lo más», de desobedientes— le traiga a él su pedrea. La mujer de Lot nunca muere, está visto, y ni siquiera se percata de que difícilmente encaja el pasado en el futuro. Andalucía tiene pendiente desde siempre la fragua de un liderato ajeno a la mediocridad.