Celaá advierte a Ayuso de que no podrá «contravenir» su ley
▶ La ministra de Educación afea la norma de Madrid que «garantiza la libertad de elección»
La ministra de Educación, Isabel Celaá, le dio ayer un claro aviso a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso: «Una ley orgánica (la Lomloe o «ley Celaá») no puede ser contravenida por una ley autonómica». La advertencia viene después de que la presidenta autonómica anunciara que ayer comenzó la tramitación de la Ley Maestra de Libertad de Elección Educativa. Se trata de una nueva normativa que «garantizará la libertad de elección, la calidad de la enseñanza, la educación especial y el español como lengua vehicular», aseguró Díaz Ayuso. Preguntada por esta cuestión, la ministra dijo ayer, durante su participación en un encuentro virtual organizado por Nueva Economía Forum que «una ley orgánica no puede ser rebatida por una ley autonómica», insistió. En cuanto a los objetivos de la ley de Ayuso, Celaá insistió en que en la recién entrada en vigor Lomloe, la «libertad está absolutamente garantizada. Está anclada en el pacto educativo constitucional del artículo 27», defendió la ministra.
Cabe recordar que la presidenta autonómica ya dio pasos en contra de la Lomloe antes de que esta entrara en vigor para poder blindar a la educación concertada. Así, el pasado 16 de diciembre la comunidad anunció la tramitación de un nuevo decreto para elevar de seis a diez años la duración de los conciertos educativos.
Además, el pasado 4 de diciembre, con el objetivo de adelantarlas, se aprobaron las instrucciones de las normas admisión de alumnos del curso 2021/2022, tal como hicieron otras comunidades del PP (Galicia, Murcia...) con el apoyo de Génova, tal como publicó ABC. El proceso de admisión suele producirse a partir del mes de febrero de cada año. Estas comunidades se adelantaban así a la entrada en vigor de la Lomloe (el pasado 19 de enero). ¿Qué conseguían con ello? Si dicho proceso de admisión de alumnos se hubiera hecho según lo que estipula la «ley Celaá», se favorecería la «zonificación» (los niños van al colegio más cercano a su domicilio y no al que quieren los padres) y se daría vía libre a que las «comisiones u órganos de garantías de admisión» puedan «evitar» la supuesta «segregación», dirigiendo a los alumnos a centros que no desean sus padres, estableciendo porcentajes de alumnos inmigrantes o con menos recursos (siendo un concepto indeterminado y discrecional, en manos de las administraciones).
No entiende a la concertada
Preguntada por la decisión de la plataforma de la concertada Más Plurales de pedir amparo al Parlamento Europeo por considerar que la «ley Celaá» constituye un «ataque sistémico» al Estado de Derecho de España, la ministra respondió que no lo entiende así. «Nuestra ley es perfectamente constitucional, que responde a los principios de reconocimiento de la libertad de enseñanza, reconocida en el artículo 27.1 con la creación de centros». Añadió que la Plataforma «está en su derecho» de recurrir al Parlamento.
Preguntada por la comparación que hizo el vicepresidente Pablo Iglesias, entre Carles Puigdemont, huido de la Justicia, con el exilio forzado de miles de republicanos españoles durante el franquismo, Celaá dijo que «las comparaciones son muy injustas y la marcha de los exiliados fue obligada, huían de una muerte, de una guerra civil, de la posibilidad de ser asesinados e iban a un ambiente que no conocían, arrastrando niños y mujeres. No lo comparo para nada con la salida de Puigdemont».
La ministra Isabel Celaá