La Guardia Civil afirma que el club pagó nóminas del hotel de Jesús León
Los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica de la Benemérita realizan un análisis detallado de las operaciones con los familiares del expresidente
EL informe final de los expertos en delitos económicos de la Guardia Civil sobre el Córdoba CF, que realiza un repaso detallado a la gestión de Jesús León, establece un minucioso análisis de los pagos cruzados que se realizaron entre el entonces propietario del club y empresas familiares. Lo hizo, además, poniendo en serias dudas los testimonios de dos hermanos del empresario montoreño que prestaron declaración en calidad de investigados.
Un detalle puede explicar la intensa unión entre las cuentas corrientes del club y las de las empresas familiares. El Córdoba llegó a pagar nóminas de los trabajadores del hotel Mirador de Montoro, una concesión municipal propiedad de León desde hace años, donde explota un coqueto establecimiento hotelero. Lo hizo mediante la entrega de 15.000 euros que recogió una persona de confianza de la familia León y que fue ingresado en una cuenta puente.
La mecánica, afirman los investigadores, era la siguiente. El Córdoba libraba fondos a nombre de la empresa de uno de los hermanos León por trabajos supuestamente realizados al club. La realidad, afirma la Guardia Civil, es que ese dinero se iba a cubrir las necesidades de empresas conjuntas. En sus declaraciones, la familia del empresario montoreño ha hecho todo lo posible por evitar cualquier elemento común como negocios, cuentas corrientes o empresas. Solo se han reconocido actividades mercantiles plenamente normales como la realización de obras en El Arcángel como la reforma que se efectuó de la tienda. Nada raro, a primera vista.
La Guardia Civil no ha dado credibilidad alguna a estas declaraciones. Una de las cuestiones que apoya esta afirmación es que se ha hallado, al menos, una empresa conjunta de denominación agrícola pero que es la que ha desarrollado la gestión del hotel. También se han hallado participaciones cruzadas en un negocio similar en el Pirineo oscense. Asimismo, los investigadores tienen constancia de numerosos pagos cruzados entre el Córdoba y las empresas familiares de dinero que se iba transfiriendo de empresa en empresa hasta acabar, en algunos casos, en Grucal. En total, se han hallado hasta nueve cuentas corrientes o productos financieros comunes de la familia bien activos bien cancelados en fechas recientes.
El seguimiento del dinero
La tesis de la investigación es que se abonaban obras o encargos irreales que pasaban por sociedades interpuestas para dar una apariencia de normalidad
El Mirador de Montoro
Los agentes detectan fondos del club entregados a una persona de confianza de la familia León para sufragar los costes del hotel que explotaba en la localidad
Los agentes del instituto armado llamaron a declarar en calidad de investigados a dos hermanos del empresario montoreño. Se les informó que se les consideraba presuntamente responsables de los siguientes supuestos delitos: falsedad en documento mercantil, corrupción en los negocios, cooperación en la administración desleal y administración indebida. Es el juez instructor del caso quien tiene que confirmar en última instancia la imputación. Los agentes cuentan con una fuente primaria de alto valor para indagar en el asunto: las conversaciones de Whatsapp de los teléfonos intervenidos. Los móviles de León han terminado siendo una mina. Allí se deja constancia de las peticiones de dinero entre las partes y las urgencias de los mismos. En algunos casos, de la finalidad y de las divergencias en su aplicación.
Propuesta de préstamo
Los auditores del Córdoba CF llegaron a advertir cuestiones relacionadas con los pagos a las empresas de la familia del entonces presidente del equipo, detenido el 7 de noviembre de 2019. Lo hizo el departamento de Contabilidad del club que se encontró con un reparo de los auditores. Para solventar el problema se ideó la mecánica, afirman los investigadores, de simular un crédito del Córdoba a las empresas familiares por una cantidad similar de pagos realizados hasta el momento. Posteriormente, los hermanos redactarían documentos privados resolviendo la deuda pendiente sin indemnización. La Guardia Civil cree que era una manera de establecer una situación de regularidad. Hasta el momento, solo se tiene constancia de los borradores sin firma.
Es complicado establecer un saldo de lo que sacaron de las cuentas de una empresa que tenía accionistas minoritarios porque la ruta del dinero es más complicada de lo que parece. Lo que a primera vista insinúa un pago a una sociedad mercantil proveedora genera, en realidad, saltos constantes de dinero entre empresas. Solo uno de los hermanos «factura» en apenas un año más de 400.000 euros de los que devuelve una parte, 87.000 euros. De esa última cifra devuelta, 40.000 salieron directamente desde la cuenta del Córdoba CF a la de Jesús León, dice la Guardia Civil, en la que entonces era su empresa matriz, Grucal, vendida por una cantidad simbólica en una operación que se encuentra también bajo la lupa de la investigación de Delitos Económicos.