El Barça pierde el tiempo en Cornellá
▶ Falla dos penaltis y solo puede superar a un Segunda B en la prórroga
Yo ya sé que hay muchos que esto lo ven encantador, pero a mí me parece un tremendo despropósito. Florentino tiene razón cuando dice que Barça y Madrid tienen que jugar en una Liga privada y europea, y que la Champions se convierta en un mundialito de clubs bien organizado. No es serio que el Madrid juegue contra el Alcoyano. Ni siquiera es serio que por culpa de un partido que ya de entrada no tenía ningún sentido tengamos ahora que afrontar una final descafeinada de este torneo, como siempre que Barça o Madrid no la juegan. El deporte está bien, pero para los amateurs. El deporte, la superación, etcétera. Para los gordos como yo es estupendo. Pero el fútbol, cuando lo juegan Barça y Madrid, no es un deporte: es un espectáculo. Y un espectáculo que compite con Disney, con Amazon o con Netflix. Y a este nivel, para darle continuidad
0
CORNELLÁ
2
BARCELONA y sentido, y para que pueda competir en condiciones, necesita cada vez más dinero. Por lo tanto, si pretendemos (y supongo que estamos de acuerdo en que lo pretendemos) que los dos equipos cuenten con los mejores jugadores del mundo y puedan ganar todos los títulos en juego, necesitan que cada partido sea un acontecimiento de primer orden internacional que genere los debidos ingresos, y no una tonta manera de arriesgar la integridad de sus estrellas en terrenos de juego demenciales y contra equipos que son una pérdida de tiempo, que quiere decir de dinero.
El Cornellá jugó dignamente, su portero Ramón paró dos penaltis y vuelan para todos y cada uno de sus jugadores mis más sinceras felicitaciones, pero en un mundo inteligente, que es un mundo que entiende los negocios, el Barça ayer tendría que haber jugado contra cualquier campeón europeo o sudamericano, lo mismo que el Madrid el martes. Y antes de que salgan los tontainas de la autenticidad y de la justicia social, los que confunden su dignidad con lo que no es rentable, como si hubiera una necesaria reciprocidad, déjenme decirles que los que tan a favor están de que el Barça vaya a jugar a Cornellá son los que luego ponen el grito en el cielo cuando el club arruinado corre el riesgo de dejar de ser de los socios y que se lo quede Goldman Sachs. Goldman Sachs entiende los negocios, y además la circuncisión, aunque da menos juego, es una superioridad.
El partido fue un dolor de muelas para el Barcelona, y los delanteros de Cornellá porque son muy malos, y chutaban como si se entrenaran entre semana con piedras en la calle, pero tuvieron ocasiones de sobra para marcar y ganar. El portero Ramón, como el del Alcoyano, fue el héroe de su equipo. Además de los penaltis, respondió a un duro disparo de Pjanic con una mano memorable. Griezmann falló todo lo que un bípedo puede fallar. Braithwaite también hizo su parte de ridículo. Dembélé en la prórroga perforó al pobre Cornellá, que lo hizo todo y no le sirvió de nada, y quedó resignado en el que por otro lado es su rincón de la Historia. Y Braithwaite remató la faena cuando ya no hacía falta.
MADRID
Florentino Pérez no ha escondido nunca su deseo de dar un vuelco al fútbol tal y como se conoce actualmente. De hecho, en la última asamblea del Real Madrid reconoció abiertamente que en el fútbol «se necesitan nuevas fórmulas que lo hagan más competitivo, más emocionante y más fuerte», invitando a afrontar cuanto antes «una reforma que no puede esperar». No mencionó la palabra Superliga, pero el presidente del club blanco hacía clara mención a este torneo del que tanto se habla y que ayer recibió un golpe durísimo por parte de la FIFA, que emitió un comunicado en el que rechazó públicamente y en nombre suyo y de las seis confederaciones la creación de dicho evento. No es, en cualquier caso, la única voz discordante de un proyecto cuyo recorrido parece nulo.
La idea navega desde hace tiempo en el planeta fútbol y Florentino Pérez asumió la voz cantante. De hecho, varias fuentes cercanas a la UEFA aseguran que el mandamás blanco estaba cocinando el plan a espaldas del propio organismo europeo y ya se habría reunido con varios clubes para seducirles, encontrando pocos adeptos convencidos. Sin ir más lejos, esta misma semana Pérez se encontró en Turín con Andrea Agnelli, presidente de la Juventus y de la ECA (asociación de equipos europeos), y se da por supuesto que hablaron largo y tendido de todo lo que envuelve al fútbol con la Superliga sobre la mesa.
El problema es que la idea de la Superliga pierde fuerza hasta quedarse en eso, en una mera idea, ya que la mayoría de los clubes supuestamente implicados han dicho que no y, según ha podido saber este periódico, únicamente secundarían la idea el mencionado Real Madrid, el Barcelona (Josep Maria Bartomeu así lo confirmó antes de dejar el palco del Camp Nou), el Manchester United y el Milán. Obviamente, detrás del interés de estos cuatro clubes hay diversos intereses tanto monetarios como deportivos.
Los impulsores de esta Superliga pensaban que el proyecto iba a ser lo suficientemente ilusionante para las grandes potencias europeas, pero no hay ni mucho menos consenso y varias entidades consideran que se les está utilizando al deslizar sus nombres en toda esta historia. Es más, según el boceto, a cuyas líneas ha tenido acceso ABC, habría grandes diferencias económicas hasta el punto de que muchos equipos opinaban que la competición partía de un favoritismo evidente hacia Madrid y Barcelona, que en el reparto de millones se verían beneficiados claramente.
La FIFA, informada de esas negociaciones en cubiertas a las que se refiere la UEFA, fue tajante ayer en su comunicado, un jaque sin escapatoria al afirmar que «tal competición no sería reconocida ni por la FIFA ni por la confederación correspondiente». «A todo club o jugador implicado en una competición así, como consecuencia, no se le permitiría participar en ninguna competición organizada por la FIFA ni por su confederación». Esta postura tan contundente choca con lo que se deslizaba desde los propios líderes del plan, que aseguraban contar con el apoyo de Gianni Infantino, presidente de la FIFA, y del que deslizaban su nombre en clave («W01», como se le conoce a nivel interno)
La UEFA sostiene que el presidente del club blanco lidera el proyecto en una operación clandestina
A Real Madrid y Barcelona solo les seguirían en este plan el Manchester United y el Inter de Milán
en los correos que compartían. La duda radica en si Infantino realmente se ha desmarcado o bien si se utilizaba su nombre para que la propuesta tuviera más fuerza.
El caso es que ayer llegó más rechazo al plan desde la Comisión Europea. «No hay margen para que unos pocos distorsionen la naturaleza universal y diversa del fútbol europeo», dijo Margaritis Schinas, vicepresidente del organismo. «El estilo de vida europeo no es compatible con el fútbol europeo reservado a los ricos y poderosos», añadió. Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, ya mantuvo con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, una larga reunión para advertirle del asunto.
El proyecto también encuentra la firme oposición de las competiciones domésticas. De hecho, es público y notorio que LaLiga siempre ha dicho que veía inviable la creación de este torneo y ayer lo reiteró Javier Tebas. «FIFA y las confederaciones son cons