Plácida clasificación de España a cuartos
▶ La selección golea y asegura el pase de ronda con el triunfo de Hungría ante Polonia
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URUGUAY
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ESPAÑA
Fue en una cita mundialista, la primera vez que coincidían, pero el duelo entre Uruguay y España pareció más un partido de entrenamiento para los de Jordi Ribera, que acabaron goleando y celebrando unas horas después el pase a los cuartos de final ayudados por el triunfo de Hungría ante Polonia (30-26). El único peligro de ayer era caer en la relajación ante un enemigo claramente inferior, pero los españoles no perdieron en ningún momento la concentración y su entrenador, además, pudo tirar de rotaciones para repartir minutos entre sus jugadores a la espera del encuentro de mañana frente a los húngaros (18.00 horas Teledeporte), en el que ambos combinados se disputarán la primera plaza del grupo.
Ribera comenzó las rotaciones desde la convocatoria. Gonzalo Pérez de Vargas y Raúl Entrerríos no llegaron a vestirse de corto en un partido que, como era más que previsible, apenas tuvo historia. El 2-2 inicial ante los dobles campeones de Europa resultó un mero espejismo para los charrúas, una simple ilusión. Su sueño no dio para más. Un castillo de naipes que se fue derrumbando con cada uno de los goles españoles. Una sucesión de tantos que permitieron que la selección cerrara el partido ya en el descanso, al que se marchó doblando en el marcador a su rival (12-24). «Era muy importante trabajar bien en el partido, respetar al máximo al rival, coger buenas sensaciones y prepararnos para lo que viene. Estamos muy contentos con el juego que hemos realizado», destacó Ribera tras la victoria.
Figueras realiza un lanzamiento
El seleccionador dio la oportunidad de debutar tanto al lateral Iosu Goñi como al portero Sergey Hernández, que se hizo gigante y demostró su enorme porvenir cerrando sus estadísticas con catorce paradas. Los españoles se tomaron el partido con la seriedad que exigía la cita en un Mundial y jugadores como Aitor Ariño, que terminó como máximo goleador (8), tuvieron la ocasión de reivindicarse. La gran actuación de Andrés Viera en la portería de Uruguay evitó que la derrota de su selección resultara aún más contundente.