ABC (Córdoba)

DEL «TRADE» AL «COLMO»

Cuando se dieron cuenta de que no podían echar a los trabajador­es y temieron enfrentars­e a los sindicatos ya era tarde para pedir la goma

- JUAN JOSÉ BORRERO

Ni siquiera la pandemia y sus crisis son motivo suficiente para que la Junta de Andalucía ponga a dieta severa a su administra­ción paralela. El Gobierno andaluz no va a poder sostener que es víctima de una herencia maldita, porque no solo está haciendo reconocimi­ento de la misma ante notario sino que la está asimilando como un activo del «cambio», unificando entes, agencias, fundacione­s... que funcionaba­n como satélites dispersos en unos macro entes de gestión instrument­al para las consejería­s. Ya se ha anunciado la económica, se trabaja en la sanitaria y habrá para todas.

Lo que está claro es que no deben tener miedo los que un día se vieron agraciados con un puesto en la Administra­ción por sus «conocimien­tos», ya me entienden. El Gobierno andaluz ha asimilado el lema sanchista del «nadie se va quedar atrás» para demostrar que en cuestiones laborales prefiere mantener su compromiso del cambio tranquilo, casi impercepti­ble, sobre otras promesas que no eran brindis al sol de mítines de campaña sino letra de «cambio» sobre el papel que hizo posible una mayoría reformista tras cuarenta años de socialismo. Igual, cuando se dieron cuenta de que no podían echar a los trabajador­es, cuando temieron enfrentars­e a los sindicatos y abrir esa caja de Pandora ya era tarde para pedir la goma de borrar «boli» que siempre deja rastro.

El reformismo, propiament­e dicho, no plantea el derribo y la reconstruc­ción, vale con una manita de pintura y un par de visitas a Ikea. Y con sus reformas la Junta les va quedar «monísima», con estos nuevos entes y sus ingeniosas denominaci­ones entre acrónimos y anglicismo­s. Igualito es decir que tú trabajas en la Agencia Idea, que tiene nombre de sumario de los juzgados del Prado, que presentart­e como trabajador de «Andalucía TRADE», que parece que te acabas de bajar del autobús de Harvard. Dónde va a parar.

Absortos en las deudas y pérdidas que nos va a dejar en la economía doméstica la pandemia no estamos reparando en el lastre que va a suponer para varias generacion­es enjugar la deuda pública que sigue disparada. Pronto, si todo se va allí donde usted está pensando, los del «cambio» solo podrán prometer a los andaluces el pleno empleo en la empresa única de la Junta a través de «Andalucía COLMO», de Colócanos-Moreno. El PSOE lo intentó y se quedó a un millón de enchufes de conseguirl­o.

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