Rechaza la propuesta de cien economistas que apoyan PSOE y Podemos

«Inconcebible». Este es el adjetivo que la presidenta del BCE ha utilizado para calificar la propuesta realizada conjuntamente por los presidentes del PSOE y Podemos consistente en solucionar el problema de la deuda pública galopante con una condonación de la misma por parte del emisor europeo. Christine Lagarde no se ha limitado a recordar lo que ya habían aclarado otros miembros del Consejo del BCE, como su vicepresidente, Luis de Guindos. Dijo que una condonación de la deuda supondría «una violación del tratado europeo que prohibe estrictamente la financiación monetaria de los Estados», una regla que constituye, «uno de los pilares fundamentales del euro». También dedicó un autorizado reproche a quienes hacen tal tipo de proposiciones, diciendo que «si la energía gastada en reclamar una anulación de la deuda por parte del BCE fuese consagrada a un debate sobre el uso de esa deuda

¡sería mucho más útil!».

Lagarde hizo estas declaraciones en una entrevista concedida a «Le Journal du Dimanche» francés y con la clara intención de frenar en seco un germen que hasta ahora solo se había manifestado tímidamente en el movimiento radical Cinco Estrellas de Beppe Grillo y

La presidenta del BCE cree que el PIB de la zona euro se incrementará un 4% este año

los extremistas griegos. «¿A qué se destinará ese gasto público? ¿En qué sectores con futuro conviene invertir? ¡Ese es hoy el asunto esencial!», comentó Lagarde.

«Todos los países de la zona euro emergerán de esta crisis con niveles de endeudamiento altos», continuó justificando la negativa, «pero no hay duda de que conseguirán reembolsarla. Las deudas se generan a largo plazo», puntualizó. Lagarde no duda que esa recuperación sostenible «creará empleo» y asegura también que «nos encaminamos hacia otra economía, comprometida con el cambio climático y la preservación de la biodiversidad».

En lo inmediato, estima que «2021 será un año de recuperación», aunque señaló que esta recuperación «está sufriendo un retraso, pero no ha sido descartada». Para la presidenta del BCE es decisivo que consigamos seguir los caminos correctos y deja claro, por otra parte, que «no recuperaremos el nivel de la actividad económica anterior a la pandemia antes de mediados de 2022».

Estima que en la zona euro el PIB crecerá un 4% este año, «quizá algo por encima», pero avisa de que «todo dependerá de la política de vacunación» contra el coronavirus en los diferentes países «y de las medidas que tomarán los gobiernos para responder a las condiciones sanitarias». Lagarde considera, por lo demás, que la crisis ha tenido como efecto acelerar la cohesión europea gracias al préstamo común logrado por los estados y pide a los gobiernos que se centren en una ratificación rápida para poder actuar lo antes posible.