El virus convierte en un ‘superventas’ el boletín oficial de la Junta
▶El número de visitas en 2020 supera los 47 millones y sólo en este mes de enero se han publicado más números de BOJA extraordinarios que en dos años
Nunca el boletín oficial de la Junta —más conocido por sus siglas, el BOJA—, ha tenido la repercusión de la que goza ahora por el coronavirus. Y no es para menos. De sus disposiciones dependen que podamos planificar unas vacaciones de fin de semana, movernos fuera de la ciudad, municipio o poder levantar la persiana de la tienda. Media Andalucía pendiente de él ha elevado a «best seller» o «superventas» su consulta en la red digital, porque desde el 10 de mayo de 2012 no se imprime en papel.
Enrique Encina es el jefe del Servicio de Publicaciones y BOJA, organismo dependiente de la Secretaría General Técnica de la Presidencia de la Junta y explica las «tripas» de este gran desconocido hasta ahora fuera de los ámbitos administrativos y judiciales. «Aunque el boletín no se imprime, consumimos más papel porque ha subido el número de libros, publicaciones y cartelería de la Junta», apunta Encina a la vez que explica que también pueden recibir encargos de particulares. «Ahora, además, se han ido incorporando al servicio centros que antes no teníamos como “clientes”, por ejemplo el Instituto Andaluz de Administración Pública al que le publicamos varios libros oficiales a lo largo del año», especifica.
Las cifras de clics a la web del BOJA el año 2020 de la pandemia marean. Más de 47 millones de páginas visitadas, 130.000 al día de media, 47.000 personas que lo consultan a diario. Esto ha supuesto un aumento de un 30% con respecto a 2019. Si se entra en el portal de la Junta (juntadeandalucia.es) siempre hay dos webs en el top de las más visitadas, el Servicio Andaluz de Empleo y el BOJA, que alternan entre ellas y se disputan el primer puesto.
Pero tampoco 2021 ha empezado tranquilo. Cuando Sanidad perimetra o suprime el comercio no esencial de municipios que superen los 500 o 1.000 contagios por cada cien mil habitantes, hay que publicarlo en el BOJA para que tomen carta de naturaleza las recomendaciones del comité de expertos. Como mucho, tienen de margen antes de las doce de la noche en que entran en vigor. «Hay veces —continúa Encina— que nos da tiempo a hacerlo con un día de antelación y otras que tenemos que trabajar a toda máquina porque casi no llegamos. Sólo en el mes de enero llevamos 13 boletines extraordinarios, cuando en los últimos cinco años se publicaban siete u ocho al año como mucho. En el 2020 se hicieron 91 extraordinarios» y esto sólo se puede llevar a cabo, explica, haciendo muchas horas extras «entre los 54 profesionales de esa casa que trabajan en dos turnos, de siete y media de la mañana hasta las nueve y media de la noche».
«Aparte de las horas que hemos tenido que añadir para sacar los boletines antes de la medianoche, hay que tener en cuenta que nuestros días laborables son de lunes a viernes, pero como esta situación es atípica y no vivida anteriormente por nadie, hemos publicado en Jueves Santo, Viernes Santo, sábados, domingos y festivos», saca pecho Encina. «Desde el minuto uno nuestros profesionales entendieron que este servicio era esencial y todos han estado dispuestos a arrimar el hombro para que los BOJA salgan cuando tengan que salir y eso que desde el 13 de marzo nos mandaron a todos a casa cuando el primer confinamiento», apunta. Con los procedimientos
mancha, para ver si los párrafos coinciden y casan. La propia normativa del boletín así lo establece y no deja margen para que se cambie algo dentro de una ley que no sea una coma, una errata evidente o un cambio de mayúscula a minúscula.
De los 54 trabajadores del Servicio no todos se dedican al BOJA, hay laborales de impresión —oficiales de primera, segunda y peones— que trabajan en las publicaciones en papel u otro tipo de soportes. Entre el personal se han dado dos casos leves de Covid y de ahí no ha pasado a más por los protocolos de seguridad que estableció la Junta de Andalucía
El primer BOJA que vio la luz fue el que dio precisamente lugar a su nacimiento. Era el 11 de agosto de 1979. Los primeros aparecían de forma quincenal, para dar un salto en los años 80 a semanal. Hay que tener en cuenta que en aquella época se componían con tipos móviles de imprenta. El 8 de marzo del 1994 cuando empezó a publicarse de forma diaria y regular. Todos los trabajadores que pertenecen al colectivo de laborales del Servicio de Publicaciones son titulados en Artes Gráficas.
Enrique Encina concluye que en el afán de modernizar el servicio quieren ofrecer en breve los «textos consolidados», normativas de la Junta de Andalucía actualizadas en su última versión y todas sus modificaciones anteriores. También están involucrados como proyecto de futuro en dejar una huella neutra de carbono en la producción, tanto en digital como en papel.