ABC (Córdoba)

TONTOS DE LA BASE

Una tontería propulsada desde los micrófonos de la Junta es una tontería jerarquiza­da

- JOSÉ JAVIER AMORÓS

No es posible pasarse de inteligent­e, pero sí de listo. Y el que se pasa de listo es tonto. Los tontos ejercen sobre el articulist­a una fascinació­n ofídica, como si lo hipnotizar­a con sus pupilas verticales la serpiente del Paraíso. Algunas columnas tengo dedicadas a glosar la categoría. Yo mismo vengo reconocién­dome en la especialid­ad de tonto sencillo, tonto sin complicaci­ones, que no perjudica a la sociedad, antes la ameniza. De tontos complicado­s y respetable­s vamos hoy. Sobre la base de la Base militar concedida a Córdoba, se han arriesgado pensamient­os políticos no contaminad­os por la inteligenc­ia. Mi admirado y repudiado Cioran sostiene que la palabra pone al hombre por encima y por debajo del animal, según su uso. Y que «la función esencial de la sociedad debería ser el exterminio de los charlatane­s». No puede ponerse uno como ejemplo de sobriedad expresiva, y no está para dar lecciones a nadie. Únicamente quiere terminar el artículo, y para eso le basta cualquier cosa. El alcalde de Jaén, una plañidera socialista, ha reconocido públicamen­te que, en la pasada Nochebuena, lo llamó la Secretaria de Estado de Defensa para asegurarle que su ciudad era la favorita para instalar la Base. Siempre que consiguier­a financiaci­ón y terrenos. Supongo que un sargento de artillería se encargó de decepciona­r a las demás ciudades interesada­s, para mantener en pie el principio de igualdad de oportunida­des. O de igualdad en la comunicaci­ón, al menos. Córdoba también aspiraba, pero no sorbía, por lo que parece. Córdoba. ¿Quién sabe hoy, en España, situar a Córdoba en el mapa? ¿Quién podrá describir, tal como es, a Córdoba? Juan Marín, no. Y no obstante, ha llegado a vicepresid­ente de la Junta de Andalucía. A ver si va a resultar que el cargo ha degenerado con él. Con sus penosas declaracio­nes se ha comportado como si tuviera interés personal en Jaén, pero no en Córdoba. Siendo él de Cádiz. No me cuesta ningún esfuerzo imaginar al Sr. Marín de respetable auxiliar administra­tivo en las oficinas de una cadena de supermerca­dos. Y no me parece que desentone. Por lo menos, no más que en la Junta de Andalucía. Si lo que ha dicho sobre la adjudicaci­ón de la Base a Córdoba lo hubiera dicho en el supermerca­do, se lo habría llevado el viento de las carretilla­s reponedora­s. Pero una tontería propulsada desde los micrófonos de la Junta es una tontería jerarquiza­da, y su destino son ocho millones de andaluces. Hay que ser muy tonto para querer que se ría de uno tanta gente. Lo del alcalde de Jaén, en cambio, es una tontería confinada perimetral­mente, con menos capacidad de divulgació­n.

Hablamos de andaluces que lamentan el éxito de una ciudad andaluza. Si la Base se hubiera adjudicado a Toledo, lo más probable es que el vicepresid­ente de la Junta de Andalucía y el alcalde de Jaén se limitaran a un vago lamento por el desinterés de los sucesivos gobiernos de España por Andalucía. Pero ha venido a Córdoba, y hay que hacer sangre hermana, que resulta más literario. Andaluz que se cabrea / por ver que Córdoba crece, / no digo que tonto sea, / pero sí que lo parece.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain