España importa los bosques-hospital con burros como terapia frente al Covid
En el parque natural de Doñana, un tratamiento ayuda a sanitarios afectados por la presión de la pandemia
En el parque natural de Doñana, en Huelva, existe desde hace un año lo que se ha llamado un ‘bosque-hospital’. No es ningún descubrimiento que los espacios naturales son elementos que ayudan a mejorar los problemas de salud emocional, pero en Doñana se ha creado un espacio con la particularidad de que los galenos del hospital onubense son los burros.
En el ‘bosque-hospital’ de Doñana se llevan a cabo desde terapias para afectados por fibromialgia, otras dirigidas a personas sordo-ciegas, hasta programas de autoestima y fortalecimiento emocional para mujeres afectadas por cáncer de mama. Pero desde que ha empezado la pandemia, este bosque cuenta con un médico muy especial: el ‘doctor burro’. «Se trata de una terapia de apoyo con asnos para el personal sanitario afectado por la presión diaria en su lucha contra el Covid-19», asegura Cristina Mariño, coordinadora de la asociación El Burrito Feliz. Desde hace un año –coincidiendo con el inicio de la pandemia–, han logrado un gran éxito entre el personal sanitario. Por ello, próximamente también podrán participar de la terapia policías y guardias civiles y así disfrutar de una jornada de descanso con un paseo por el bosque y acompañados por el burro terapeuta.
Mariño, que realiza este proyecto de manera altruista y lo compagina con su trabajo como administrativa en un hospital de Huelva, reconoce: «Es un trabajo agotador, pero no podemos rendirnos ni negar nada a estos colectivos que tanto necesitan esta actividad. Es totalmente gratuita». Según comenta Luis Bejarano, presidente de la asociación El Burrito Feliz, «somos el primer país que tiene esta iniciativa, algo que nos llena de orgullo. En estos tiempos tan complicados hacerse popular por algo bueno es gratificante. Añade que «se trata de una actividad que rompe protocolos: potencia la lucha contra el desgaste emocional entre facultativos».
Ruth Lirio relata el éxito de las iniciativas de El Burrito Feliz. Ella trabaja como tutora en la Asociación Española de Familias de Personas con Sordoceguera (Apascide) en Huelva. Se encargó de acompañar a Alejandra,
Burros bomberos
Los burros son los protagonistas de este singular tratamiento antiestrés. En la actualidad en Doñana cuentan con 21 animales, aunque el que está realizando gran parte de su trabajo como terapeuta es uno, al que llaman Magallanes.
El proyecto nació con la previsión de que la pandemia duraría unos meses; pero la llegada de una ola de contagios tras otra y la consiguiente virulencia de cada una de ellas les ha hecho continuar con su labor. Desde El Burrito Feliz relatan que en breve «se incorporarán al equipo de terapeutas dos burritas» que han sido preparadas para desempeñar esta función.
Pero al margen de esta iniciativa, en El Burrito Feliz tienen otros proyectos donde estos animales también son los protagonistas, como los ‘burros bomberos’, en el que los animales se encargan de desbrozar la zona de Doñana en primavera y verano y de esta manera prevenir incendios. En la iniciativa ‘burro va a la escuela’ visitan colegios y muestran a los niños la historia de estos animales. Por último, en la iniciativa ‘burros limpian costas’, varios asnos pasean por el litoral de Huelva con unos pequeños serones recogiendo plástico y otras basuras.
En esta asociación aspiran a que, en un futuro, este ‘bosque-hospital’ cuente con las infraestructuras que permitan atención médica a personas derivadas desde hospitales y centros sanitarios. «De esta forma España sería la primera nación en contar con un verdadero hospital inmerso en un espacio natural», comenta a este diario Luis Bejarano.