Iglesias exigirá a Gabilondo sanidad, vivienda o educación
▶ No quiere «tragarse» competencias limitadas, como pasó en el Gobierno central Podemos
cunas ha administrado de las que ha recibido.
Trasladan desde las filas socialistas que Madrid es la que peor vacuna en la franja de más de 80 años. Ciertamente en esta franja la Comunidad está lejos de los peores datos. Un 68,8% de su población de esa edad tiene al menos una dosis. Lejos de las regiones más rápidas, pero Cataluña, País Vasco y Canarias van más lentas en este tramo de edad. Sin embargo, si se acude a los datos de aquellas personas de más de 80 años que han recibido ya las dos dosis, Madrid está en el 46,5%. Por encima de la media nacional del 44%.
Por su parte, el candidato Gabilondo, acusó a PP y Vox de «aislar Madrid» y de fomentar «un independentismo de derechas». El candidato del PSOE volvió a decir que no pactaría con Pablo Iglesias y que no subirá los impuestos.
La campaña de Pablo Iglesias para las elecciones en la Comunidad de Madrid pivotará sobre dos ejes: el primero, que su nombre sea lo que active y movilice al votante de izquierda; segundo, mano tendida a las candidaturas de PSOE y Más Madrid y agresividad contra Partido Popular y Vox. ¿Y Ciudadanos, qué? Cuanto más lejos, mejor. El éxito de Podemos fue sacarles de los Presupuestos Generales del Estado y volverán a intentar dejarlos fuera de juego.
En esta ocasión, Iglesias rechazará puestos vacíos, ‘semivacíos’ o gestos y exigirá competencias plenas y capacidad de gestión. El exvicepresidente del Gobierno confía para ello en que una participación alta entregue el poder de la región al «bloque progresista» para reeditar la coalición del Gobierno central con el apoyo de Más Madrid.
«Si la mayoría social madrileña sale a votar —dijo Iglesias el jueves—, habrá Gobierno de izquierdas en la Comunidad de Madrid». El escenario ideal para el secretario general de Podemos sería que UP pueda gestionar las competencias y las Consejerías de Educación, Sanidad e incluso Vivienda. Esta materia es muy importante para ellos, por su medida para intervenir los precios del alquiler en zonas tensionadas.
«Donde haya estado el PP quiere llegar y ‘levantar las alfombras’», apuntan en UP; y añaden también que Iglesias no se conformará con menos porque no ha dejado de ser vicepresidente para negociar en falso y ocupar un cargo que no tenga gestión. «Revertir las políticas del PP», insisten: «Ser útil». El propio Iglesias lo planteó así en la presentación de su candidatura esta semana: «Puede haber un Gobierno que defienda la sanidad pública, la educación pública y que entienda que la vivienda es un derecho. Basta con que la gente humilde, la gente de los barrios, de las ciudades del sur, de los pueblos y de todas las ciudades vote».
Demostrar la utilidad de UP
Si bien PSOE, Unidas Podemos (UP) y Más Madrid no suman lo suficiente en la mayoría de las encuestas, aún queda un mes por delante y una campaña muy intensa que sin duda se jugará también en los plenos del Congreso. De conseguir los números necesarios para formar Ejecutivo el 4-M, algo que todavía está por comprobar, el exvicepresidente ya tiene claro que no aceptará cualquier sillón artificial.
La supervivencia de su espacio político depende de poder demostrar su utilidad. Sin poderes reales, sin capacidad de aplicar su «agenda social» o modificar políticas de los populares, como defienden, no hay garantía de recuperarse. El partido morado está en un estado de declive que ni con su entrada en Moncloa pareció mejorar.
Solo en Cataluña han mantenido su representación, pero en el resto de comunidades han caído e Iglesias se ha lanzado a Madrid para evitar el desastre. «Podemos tragó con competencias limitadas, él lo ha dicho algunas veces», explican desde UP en el Gobierno, al respecto de la coalición nacional. Una vez aprobados los Presupuestos, Sánchez se reforzó y les relegó a un papel muy secundario.