Tres tramos en solfa
los que los Lugares de Interés Comunitario (LIC) Guadiato-Bembézar y Guadalmellato se incluyeron en la Red Natura 2000, de enclaves protegidos.
Instó al citado Ministerio a que buscara «alternativas» principalmente en los subtramos I (de la localidad espeleña a Cerro Muriano) y II (el que bordearía la capital). El Gobierno central, entonces dirigido por el PP, alegó que «trató en vano de definir soluciones» que Medio Ambiente considerara viables. Este último Ministerio declaró en 2014 la caducidad del procedimiento de la DIA por «no garantizarse» que la ejecución permitiera conservar los valores naturales de los LIC afectados.
El Gobierno planteó en 2017 que el recorrido Espiel-Córdoba tuviera entidad propia y se articulara con «soluciones de mejora de la capacidad mediante duplicación de la calzada» de la N-432 que respetasen los lugares de interés natural comunitario. Y ésa es la línea que ha seguido Fomento.
En la reciente respuesta a la que ha tenido acceso ABC se señala sobre los otros dos trazados cordobeses, el Badajoz-Espiel —se plantea siguiendo la línea actual de la N-432 y cruza dos lugares ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) en Extremadura y bordea la del Alto Guadiato— y el Córdoba-Pinos Puente, que se están redactando sus estudios informativos.
El Gobierno de Sánchez confiesa en la contestación que «no es posible aventurar las fechas en que puedan finalizarse». En el caso de los estudios informativos, sigue el Ejecutivo, porque los plazos los «condiciona» el procedimiento de información pública y de evaluación de impacto ambiental por el Ministerio de Transición Ecológica al que se tendrán que someter estos documentos.
En cuanto al anteproyecto del tramo Espiel-Córdoba, el Gobierno señala lo obvio. No puede dar fechas porque «aún no se ha iniciado la redacción del mismo».
Dos años y medio después de la resurrección socialista, ni un metro de la A-81 en Córdoba tiene el visto bueno ambiental, crucial para su viabilidad. Y tras lograr la Declaración de Impacto Ambiental quedan más pasos.
Badajoz-Espiel
En 2008, se calculó que esta parte de la A-81 costaría 644 millones. Su proyecto se empezó a tramitar en 2005, pero el expediente de evaluación ambiental (determina su viabilidad) caducó en 2012. En 2018, el Gobierno retomó la redacción del proyecto —hoy aún continúa elaborándose—, siguiendo la actual línea de la N-432.
Espiel-Córdoba
En 2008 este tramo y el que llegará a Granada se tramitaron juntos (1.333 millones). Medio Ambiente no le dio la Declaración de Impacto Ambiental. Hoy se plantea sólo como un desdoblamiento de la N432. Ni hay estudio informativo ni anteproyecto.
Córdoba-Pinos Puente
Como el Badajoz Espiel, el Ministerio de Transportes (antes Fomento) tiene en redacción el estudio informativo de ese tramo, para que luego el Departamento de Transición Ecológica (antes Medio Ambiente) dictamine si es viable. Para cada tramo, habrá que redactar un proyecto de construcción. Después restaría sacar a concurso las obras. Los fondos del Gobierno en sus cuentas de 2021 para la A-81 en Córdoba son 500.000 euros que encajan en gastos de la fase de tramitación.
Variante de Zafra
La N-432 acaba de ser noticia porque el ministro anunció que antes del verano se licitará la variante de Zafra (Badajoz) por 28 millones, pero será una vía convencional (un carril en cada sentido), pese a estar en el horizonte la A-81. De hecho, el diputado por Córdoba del PP, Andrés Lorite, advirtió la pasada semana que Ábalos, con esta variante, «descarta por la vía de los hechos» la autovía.
En Granada sí hay obras en marcha de esta infraestructura: son las de la conexión entre Pinos Puente y Atarfe, un tramo de autovía de un poco más de 100 millones que se espera inaugurar en el segundo semestre de 2021. Además en septiembre se aprobó el proyecto del enlace entre Atarfe y Granada, con un coste estimado de 13,2 millones. En 2017, el Gobierno entonces del PP justificaba ejecutar la vía de alta capacidad en Granada por su alta siniestralidad en Pinos Puente.