El Covid ‘silencia’ a los docentes
La mascarilla y la distancia afecta a las clases porque los profesores tienen que forzar más la garganta para hacerse oír
La pandemia de coronavirus tiene víctimas colaterales aunque no se contagien de Covid-19. Son los profesores quienes, obligados a usar mascarilla y guardar la distancia de seguridad, llevan desde el inicio de este curso forzando la voz para hacerse oír entre sus alumnos. Y no es un problema menor porque la voz es «la principal herramienta de los profesores», explica Elena García, responsable de Educación del sindicato Csif Andalucía.
Señala García además que todos estos inconvenientes que está causando la crisis del Covid-19 en la voz de los docentes no tienen la categoría de enfermedad profesional. Tan solo los nódulos en las cuerdas vocales entran en ese grupo. La ronquera, la afonía o las molestias quedan para la administración como gajes del oficio, no problemas derivados de la actividad profesional.
Los problemas de voz de los docentes por culpa de las medidas de la pandemia, han detectado desde Csif, es una realidad que va en aumento. Lejos de mejorar, el «sobreesfuerzo» de los docentes al impartir clases ha ido en aumento en los últimos meses.
Además, la dificultad para hacerse entender no es solo un problema en la voz de los profesores porque, indica García, la voz es un elemento fundamental a la hora de hacerse entender. «Es un apoyo visual notable para la comprensión», indica. Y a todo eso se suma que con la mascarilla los docentes tienen además problemas de «falta de coordinación fono respiratoria» que altera la comunicación.
Micrófonos
Para sortear estos contratiempos mientras la pandemia remite y se puede prescindir de las mascarillas —algo que ni siquiera está sobre la mesa en espacios cerrados en un futuro cercano—, los profesores sí que tienen herramientas con las que ayudarse a no perder la voz por culpa de la pandemia.
Señala García que la principal ayuda puede ser el uso de micrófonos, que amplifican la voz del docente sin esfuerzo extra. «Hemos detectado que muchos profesores desconocen que a través de las propias unidades de prevención de riesgos laborales podemos reclamar dispositivos amplificadores en caso de enfermedad profesional».
Otros consejos que dan los expertos a quienes dan clases para ayudar su voz mientras deban llevar mascarilla pasan por una adecuada higiene vocal, beber agua para mantener la garganta hidratada, evitar las comidas copiosas así como las bebidas muy frías o calientes. Y, sobre todo, no forzar la voz. A esos se puede añadir recomiendan un «control postural consciente y aprender coordinación fono respiratoria».
Las comidas copiosas o las bebidas muy frías dañan también la garganta de los docentes