El exdirector de la Orquesta: «Nunca he echado a ningún niño de ningún concierto»
Domínguez-Nieto pidió explicar su postura ante el consejo rector antes de que se anunciara su cese
El exdirector de la Orquesta de Córdoba Carlos Domínguez-Nieto se defendió ayer de las acusaciones que han motivado su despido, tras cinco años al frente, en las que se reprobó su presunta actitud con un grupo de niños con discapacidad durante un concierto el pasado 15 de marzo.
Según dieron a conocer en redes sociales profesores del colegio público Fernán Pérez de Oliva, al citado concierto acudieron alumnos con necesidades especiales motoras, de comunicación y cognitivas, y el director Domínguez-Nieto protagonizó uno de los «momentos más indecentes vividos por nuestra comunidad educativa».
«Apagó las luces impidiendo poder signar al alumnado sordo; mandó apagar los comunicadores de niños y niñas con NEAE; señaló a los menores con una frase lapidaria: ‘Llorones fuera’, y dijo que el alumnado que llorara tenía que salir porque molestaba a los demás. Además, trató de amedrentar a una compañera del centro que le recriminó su insensibilidad y falta de cordura». Tras este incidente, la Orquesta y su gerente acordaron la salida inmediata de Domínguez-Nieto.
El ya exdirector asegura, a través de un comunicado, que «nunca he echado a ningún niño de ningún concierto. Todas las acusaciones aparecidas en algunos medios sobre esta cuestión son falsas». Explica, además, que «la Orquesta de Córdoba no ha hecho ningún concierto dedicado únicamente a niños con necesidades especiales. El concierto sobre el que se ha hablado tanto en los medios era un concierto didáctico para niños, y nadie de la organización fue previamente informado de la presencia en el mismo de niños con autismo».
Domínguez-Nieto apunta que en el momento del incidente no había presente personal de sala del teatro. «Nunca levanté la voz, ni utilicé las expresiones publicadas en algunos medios. Después de dos minutos de lloros y llantos desconsolados, invité educadamente a los adultos presentes a que acompañaran fuera de la sala a esos niños que aparentemente estaban sufriendo. Por las consecuencias de esta invitación pedí disculpas», recoge su escrito.
Crítico con el gerente
Tras su cese, el exdirector afirma a que nunca acordó el fin de su contrato «y siempre he insistido en cumplir todos y cada uno de mis compromisos». Asegura que el gerente de la Orquesta «me ha negado en todo momento presentar personalmente mi punto de vista al Consejo Rector», y que, ante esto, pidió audiencia con el presidente y vicepresidente, pero «nunca he recibido respuesta alguna a esta solicitud».
Domínguez-Nieto critica que la Orquesta anunciara a los medios su cese el jueves 30 de marzo, «cuatro días antes de que el Consejo Rector se reuniera para tratarlo», y que el gerente haya reprogramado el resto de la temporada, «presentándola públicamente antes de que yo haya recibido ningún tipo de notificación de cese y sea efectivo».
A pesar de todo ello, continúa el escrito, «no puedo sino de agradecer a Córdoba cinco maravillosos años de grandes conciertos y vivencias que recordaré siempre».