Luto en el Mundial de rallys 17 años después
Craig Breen, piloto del WRC, fallece tras estrellar su coche en unos entrenamientos
La sonrisa de Craig Breen (Irlanda, 1990) se apagó ayer para siempre tras sufrir un accidente mortal mientras preparaba la próxima cita del Mundial de rallys (WRC). El piloto perdió el control de su Hyundai y golpeó contra uno de los postes que delimitan la carretera, lo que resultó fatal. Tragedia que tiñe de luto al WRC tras casi dos décadas sin tener que lamentar ningún fallecimiento.
El suceso ocurrió alrededor del mediodía cerca de la ciudad de Zlatar, al norte de Croacia, donde el equipo Hyundai Motorsport estaba realizando pruebas para la próxima semana, cuando se disputará el rally de ese país, la segunda cita del Mundial en la que Breen tenía previsto participar. Aunque todavía se están investigando las causas del accidente, según las autoridades croatas, «el coche se salió de la ruta y golpeó un poste de madera», golpeando el lateral del conductor. No se pudo hacer nada por salvar la vida del irlandés, fallecido casi al instante. Su copiloto, James Fulton, resultó milagrosamente ileso.
Compañero de Dani Sordo
«La familia del WRC está triste y conmocionada por la muerte de Craig Breen. Nuestros pensamientos están con su familia en estos momentos tan duros», explicaba la organización del Mundial nada más conocer el fallecimiento del irlandés, que compartía el tercer coche de Hyundai en el campeonato con Dani Sordo. El español, que se encontraba en Alemania afinando los reglajes que tenía que utilizar Breen en Croacia la próxima semana, recibió la noticia con incredulidad. «¡Que alguien me despierte de esta pesadilla... No me puedo creer la llamada que he recibido hace unas horas diciendo que nos dejas para siempre. No es posible. ¡Vaya palo! Descansa en paz, amigo. Te queremos mucho», acertaba a expresar Sordo en sus redes sociales. Un mensaje lleno de emoción al que se unieron muchos más, como el que envío la Fórmula 1 o pilotos de diferentes modalidades del motor.
Breen había comenzado bien la temporada, luchando por la victoria en el
Rally de Suecia, en el que acabó segundo. El de Croacia, de la próxima semana, tendría que ser su segunda participación en el Mundial 2023, en el que se alternaba con Dani Sordo a los mandos del i20. La muerte del irlandés es una auténtica fatalidad con un alto componente de azar. La seguridad en los actuales coches de la máxima categoría es tan grande que hace muy complicado que un piloto o copiloto pueda fallecer en un accidente. De hecho, hay que volver la vista atrás más de tres décadas para encontrar al último piloto muerto en una prueba del Mundial. Fue el portugués Augusto Mendes, que falleció durante el Rally de Portugal de 1989.
Después de aquella tragedia ha habido otras cuatro, que se llevaron la vida de otros tantos copilotos que, por su situación en el vehículo según las estadísticas de tráfico, son más vulnerables. Se trata del francés Francis Malaussène en Montecarlo (1990), el neozelandés Rodger Freeth en Australia (1993), el británico Michael Park en Gales (2005) y el alemán Jörg Bastuck en España (2006).
Breen es ahora el último de esta lista que parecía olvidada y a la que el mundo del rally suma una nueva víctima. Se espera que durante la prueba de Croacia se lleven a cabo diferentes actos de homenaje en memoria del irlandés, uno de los pilotos más queridos dentro del campeonato.
Desde que falleciera el copiloto Jörg Bastuck, en el Rally de España 2006, no había habido ninguna muerte dentro del Mundial