El mercado invernal no da juego
▶Los seis refuerzos de enero del conjunto blanquiverde apenas han tenido incidencia en el equipo y no han elevado el nivel de la plantilla
El mercado invernal fue el origen de la mala dinámica que atraviesa el Córdoba en el Grupo 1 de Primera Federación. El conjunto blanquiverde, ahora a las órdenes de Manuel Mosquera, acarrea una serie de resultados negativos en la segunda vuelta que le han llevado a ganar un solo encuentro de la segunda mitad de competición.
Ante la sorpresa de la afición y la propia dirección deportiva, hubo seis jugadores del primer equipo que pidieron salir a pesar de que el Córdoba era líder, peleando por el ascenso directo tras una primera vuelta magistral. La directiva tuvo que incorporar a seis nuevos jugadores para suplir las bajas. Llegaron con la idea de ser claves para el equipo, pero a día de hoy ni están jugando, ni tienen incidencia en el campo.
El primero en llegar fue el centrocampista Antonio Caballero que fue de más a menos en sus primeros encuentros. Aportó un soplo de aire fresco a una medular que ya daba síntomas de agotamiento con Diarra y Javi Flores que han bajado notablemente su nivel.
Es el fichaje invernal con más minutos, con 586, pero no se ha establecido como titular. Manuel Mosquera le dio la oportunidad en su primer partido ante el Alcorcón, pero sigue sin mejorar lo que había en el centro del campo. No se encuentra cómodo junto a sus compañeros y le está costando hacerse un hueco.
Por otro lado, está Armando Shashoua que también quiere hacerse un hueco en el centro del campo, pero está muy lejos de conseguirlo. Con Germán Crespo no tuvo apenas oportunidades a pesar de dejar buenas sensaciones en su debut ante el Celta B en El Arcángel. Todo parecía indicar que se metería de lleno en la pelea por ser titular, pero apenas acumula 322 minutos en su corta etapa como blanquiverde.
Tampoco ha contado con la confianza de Manuel Mosquera en el debut ante el Alcorcón pues no le dio ningún minuto al igual que a Javi Flores. El técnico gallego optó por jugar con Caballero y Diarra, pero estuvieron totalmente desconectados, sufriendo las transiciones del conjunto alfarero.
Dejando a un lado el centro del campo, en la zona de ataque, los refuerzos invernales tampoco han dado un salto de calidad a lo que ya tenía el Córdoba. Por su parte, Marco Camus llegó para competir con Simo por el extremo izquierdo, pero esa lucha es inexistente.
El extremo cántabro acumula poco más de 200 minutos con la blanquiverde. Las lesiones le han hecho alejarse de la titularidad que nunca ha logrado alcanzar. Ha dejado pequeños destellos que subido ligeramente el optimismo del cordobesismo, pero fue un espejismo. Sigue sin poder entrar al grupo y dejar su huella a pesar de llegar desde Segunda División.
La gran decepción
Un caso similar es el de Canario. El extremo llegó para ser titular desde el Atlético Baleares donde era pieza clave. Es el fichaje invernal que menos ha jugado con el Córdoba con apenas 160 minutos. En la etapa de Germán Crespo ha jugado los últimos minutos de los partidos o ni eso. Ha jugado hasta de lateral derecho por las rotaciones del técnico granadino.
Es sin duda el fichaje invernal que más está decepcionando a la afición blanquiverde que mira hacia los despachos preguntándose si la dirección deportiva hizo un buen trabajo en el mercado invernal, el origen de la mala dinámica del equipo que cuatro meses después no levanta cabeza. En la zona de ataque llegó Juan Villar para tratar de disputar la titularidad a Willy y Antonio Casas. A pesar de ser un delantero con experiencia, no ha conseguido instalarse en el once titular y no pasa de los 237 minutos con la camiseta cordobesista.
Es el único jugador que ha conseguido ver puerta. Un solo gol. Marcó ante el Real Madrid Castilla y rompió una sequía goleadora del Córdoba que duró más de 400 minutos. Lamentablemente, el equipo perdió en El Arcángel ante el filial merengue. No ha
Rayo de esperanza Alberto Jiménez, el último en llegar, se sitúa como el mejor fichaje por su solvencia y jerarquía en el eje de la zaga del equipo
vuelto a ver portería y está jugando los últimos minutos de los encuentros.
El rayo de esperanza para el cordobesismo es Alberto Jiménez. El central canario, con 360 minutos en su casillero particular, llegó tras el mercado invernal, como agente libre. Tras una pequeña pretemporada individual, logró meterse de lleno en el once titular y está cumpliendo con su función.
Sin brillanteces, pero impone criterio y jerarquía en la zona de atrás y es el mejor recambio para Gudelj que por su dolencia cardiaca no podrá estar con el Córdoba, al menos hasta la próxima temporada.
El rendimiento de los seis fichajes invernales sigue en suspenso. El propio director deportivo, Juan Gutiérrez ‘Juanito’ confesó que el equipo “no ha mejorado con los fichajes de invierno porque no gana”.
Las estadísticas no engañan, el equipo tenía un mejor fondo de armario en la primera vuelta y cambiaba la dinámica del encuentro desde el banquillo. Lamentablemente, en esta segunda mitad, el equipo se ha debilitado en todas sus posiciones y el margen de maniobra se agota.
Un sólo gol El delantero Juan Villar, que llegó para competir con Willy y Casas por la titularidad, sólo ha marcado un gol este tiempo