LAS MÁS DESEADAS
Valencia
Según los sondeos, los populares podrían ser la fuerza más votada en esta capital de provincia, pero la suma de los partidos de izquierdas podría dejarle fuera de la alcaldía. En la Comunidad Valenciana sucede lo mismo. Las encuestas anticipan una victoria popular pero sin garantías de gobierno por la posible suma de la izquierda.
Madrid
Todo apunta a que el PP mantendrá la alcaldía de la capital, aunque dependerá de Vox en mayor medida que la Comunidad de Madrid, donde Isabel Díaz Ayuso podría lograr mayoría absoluta.
Sevilla
Esta ciudad ha sido un feudo socialista, pero los populares aspiran a conquistarla y las encuestas apuntan a una competición muy igualada este 28M.
Barcelona
El bastón de mando de la Ciudad Condal podría pasar a manos del PSOE, que ya forma parte del equipo de gobierno de Ada Colau. No obstante, las encuestas anticipan una fuerte competencia con Junts y Los Comunes. Es la única gran plaza que el PSOE tiene opciones de reconquistar. nes de españoles no habían decidido su voto en la primera previa a la campaña por lo que pueden ser determinantes para que la victoria se incline hacia uno u otro bloque. Y en los territorios donde el resultado sea más ajustado y exista un mayor número de residentes fuera de nuestras fronteras, puede entrar en juego el tercer elemento no contemplado en las encuestas: el voto exterior o voto CERA.
Por primera vez desde 2010, los españoles que viven en otros países podrán votar sin trabas al haberse derogado el voto rogado el pasado otoño. A ello se une el fuerte crecimiento que ha experimentado este colectivo en los últimos trece años, hasta situarse hoy en 1,05 millones con derecho a voto en estas elecciones autonómicas –2,3 millones si hoy se celebraran elecciones generales–. Estos tres ingredientes hacen pensar que este domingo puede haber sorpresas sobre lo anticipado por las encuestas.
Los resultados de unos comicios autonómicos y locales no son extrapolables a las generales, pero desde el primer momento el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, planteó la cita como una primera vuelta electoral y el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, terminó aceptando el órdago asumiendo que se dirime un plebiscito sobre el sanchismo. Por ello, lo que suceda en las plazas en juego este 28M servirá de termómetro para las generales de final de año y marcará, además, la estrategia de las formaciones políticas hasta entonces.