El Bundestag da luz verde a las deportaciones masivas de Scholz
La Policía podrá allanar domicilios en busca de los que intentan evitar la repatriación
Los solicitantes de asilo rechazados serán deportados más rápidamente a partir de ahora en Alemania. El Bundestag aprobó ayer la llamada Ley de Mejora del Retorno, la puesta en marcha legal de las ‘deportaciones masivas’ que Olaf Scholz había anunciado anteriormente. A los votos de la ‘coalición semáforo’ les faltaron algunos de diputados verdes, que manifestaron así su disconformidad con este endurecimiento de la política migratoria y se unieron al voto en contra de la conservadora CDU/CSU y de Alternativa para Alemania (AfD). En adelante, los solicitantes de asilo rechazados permanecerán detenidos durante más tiempo y la Policía dispone de capacidad legal para allanar hogares en busca que los que intentan evitar la repatriación.
La ministra de Interior, Nancy Faeser, defendió que estas deportaciones más rápidas son un requisito previo para la aceptación social de la migración, en un contexto electoral en el que AfD, el partido populista antiextranjeros, obtiene en las encuestas el puesto de segundo más votado a escala federal y primero más votado en los Bundesländer orientales. El gobierno de Olaf Scholz, formado por socialdemócratas, verdes y liberales, intenta así apropiarse del discurso a favor de poner orden en la inmigración, que según los sondeos es el asunto que más preocupa a los alemanes y el que más tenido en cuenta será de cara a las próximas elecciones europeas.
El objetivo del nuevo reglamento es evitar que los afectados se oculten. Las personas sin derecho a recibir el estatus de asilo permanecen a menudo en el país debido a que la carencia de documentación válida retrasa el proceso, a que la Policía carecía hasta ahora de instrumentos para buscarlos y también a que el periodo de detención expira muchas veces sin que haya sido posible organizar su recepción por parte del país de origen. La ley prevé una serie de simplificaciones procesales y una prórroga de la orden de detención evitará que muchas deportaciones fracasen burocráticamente en el último momento.
La duración máxima legal de la detención previa a la salida se amplía de 10 a 28 días y aquellos que se vean obligados a abandonar el país detenidos por la comisión de algún delito ya no tienen que ser notificados. El requisito actual de notificación con un mes de antelación para las deportaciones, después de un período de tolerancia de un año, ya no se aplicará. Además, hay nuevos motivos de expulsión, como la comisión de delitos antisemitas o la entrada en el país con documentos falsos.
Salvamento marítimo
En el caso de las personas sin documentos de identidad, la Policía podrá incautar y leer los datos de su teléfono móvil para aclarar la identidad y el país de origen. El salvamento marítimo no será penalizado, un «compromiso», según la verde Helge Limburg, a cambio de las al menos 600 expulsiones adicionales en el primer año. Alemania tramita en estos momentos un promedio de 700 solicitudes de asilo al día y todos los solicitantes tendrán a partir de ahora una defensa obligatoria en procedimientos relacionados con la detención por deportación o la detención de inmigrantes, otra concesión a Los Verdes.
La Oficina Federal de Migración y Refugiados registró 329.120 solicitudes de asilo en 2023. Solo ha habido tres años con datos más abultados: en la crisis migratoria de 2015/2016 y durante la guerra de Yugoslavia en 1992. Los sirios siguen siendo el grupo más numeroso, con 102.930 solicitudes. El año pasado llegaron un 45% más de sirios que el año anterior y casi sin excepción ya habían encontrado protección en un país vecino seguro antes de su entrada no autorizada en Alemania. Los turcos también llegan incluso con más fuerza que en los 90: 61.181 solicitudes y un aumento del 156%. Es el segundo mayor grupo, por delante de los afganos, con 51.275 personas, que aumentan un 41%.