«La Medalla de Andalucía sería un reconocimiento muy emotivo para el grupo»
▶Los cordobeses Medina Azahara, último bastión del rock andaluz, estrenarán su nueva gira el 9 de febrero en el Cartuja Center de sevilla
Medina Azahara es el último reducto del rock andaluz, el bastión que con 44 años de carrera a sus espaldas sigue izando sobre los escenarios la bandera de una forma única e histórica de hacer música. Los incombustibles cordobeses estrenaron disco, ‘El sueño eterno’, hace poco más de un mes. Manuel Martínez, cantante y líder de la mítica banda, hace un paréntesis en una semana intensísima de ensayos previos al pistoletazo de salida de una más que ilusionante gira con la que recorrerán toda la geografía española durante este 2024 y que arrancará el próximo 9 de febrero en el Cartuja Center de Sevilla. —¿El Cartuja Center Cite será el primer
auditorio en el que se podrá disfrutar en directo del nuevo repertorio. ¿Por qué arrancan en Sevilla?
—Va a ser un año con muchos conciertos, como es habitual en Medina. La idea es recorrer todo el país para que todo el mundo conozca los temas de ‘El sueño eterno’. Empezamos en Sevilla porque siempre ha sido una ciudad muy especial para nosotros, donde nos sentimos enormemente queridos. Dada la importancia de Sevilla y la calidad del auditorio, nos parecía el lugar ideal para empezar.
—¿En la época de los sencillos, Medina Azahara va y saca un disco doble con una duración de una hora y 41 minutos. ¿Es una manera de demostrar que vuestra música vive al margen de las tendencias?
—¿A ti qué te parece? (risas) Ya sabes que nosotros somos así, nos gusta ser distintos, ir un poco a contracorriente. Somos Medina Azahara y vamos por un camino distinto a lo que se mueve en el día a día. No nos regimos por las modas en ningún sentido, ni en lo musical ni en la forma de hacer los trabajos. Pretendemos hacer discos que perduren en el tiempo. Además, tenemos la fortuna de contar con una compañía que en cuanto le comentamos la idea de hacer un disco doble no puso el más mínimo inconveniente.
—También sorprende que un grupo que este año cumple 44 años de historia publique 24 canciones y que todas sean inéditas. Pese al larguísimo camino recorrido, parece que todavía hay muchas cosas que contar…
—Sin duda. Me siento con la mente fresca para seguir componiendo y cantando. Ten en cuenta que el mundo no tiene nada que ver 1980 con este tiempo, entonces hay nuevas vivencias, nuevas guerras por las que protestar, gente que de alguna forma está loca perdida y que hace cosas que hay que criticar. Y nosotros estamos aquí para eso, para expresar lo que sentimos a través del gran altavoz que es Medina.
—En el disco, por supuesto, no falta vuestro canto a Andalucía (con el tema ‘Almalucía’), a la que siempre llevan por bandera. En este sentido,
¿echa en falta un reconocimiento institucional? La Medalla de Andalucía, por ejemplo.
—Es una parte con la que nosotros no contamos. Si viene, bienvenidísima sea.
—¿Pero nunca ha pensado al ver la lista de galardonados que Medina Azahara ha hecho méritos de sobra para obtener ese reconocimiento?
—¡Por supuesto! Pero es un pataleo que no nos pertenece, no merece la pena llorar por algo que no está a nuestro alcance. Esa decisión pertenece a los políticos. Por supuesto que nos encantaría, esa Medalla de Andalucía sería un reconocimiento muy emotivo para nosotros. Pero bueno, si algún día se acuerdan de nosotros, aquí estaremos para recogerla enormemente orgullosos.
—‘Quien pudiera’ recuerda mucho a Triana en ciertos fragmentos de ‘Hijos del agobio’.
—Bueno, en este caso no te puedo decir mucho porque la música es de Paco Ventura, pero es cierto que es el tema que más suena al rock andaluz auténtico, y se tiene que parecer a Triana, Alameda, Medina… Para mí es un temazo.
—Por cierto, ¿en qué momento se encuentra el rock andaluz?
—Ahora mismo está Medina Azahara y para de contar. Aunque procuramos ponernos al día con cada trabajo, no tenemos nada que ver con grupos que están saliendo actualmente y que se auto incluyen en el rock andaluz. Nosotros vamos por una senda aparte. Intentamos seguir creando calidad en todos los sentidos y que nuestros conciertos sean llamativos.
—¿Cómo surge la colaboración de José Andrëa (el conocido ex vocalista de Mago de Oz) en el corte ‘Todo el mundo en pie’? La influencia de la banda gallega es más que evidente en este tema, con claras reminiscencias de la popularísima ‘Fiesta pagana’.
—Está hecho adrede. Yo llevaba bastante tiempo con una melodía metida en la cabeza y se la comenté a Paco Ventura (guitarrista): “Tío, tengo una idea que me recuerda muchísimo a Mago de Oz”. Y la hicimos. Y cuando se la pusimos a gente que compadrea con nosotros nos transmitió que era un temazo y nos animaron a meterlo en el disco. Y ya que se parecía mucho, decidimos hacer las cosas como siempre las hemos hecho: ¿Suena a Mago? Pues nos traemos a José Andreä, que fue el cantante que más éxito tuvo con ellos, que accedió encantado, a Fran tocando la guitarra y a violinistas y flautistas del grupo.
—La portada es muy espectacular. Con esa llamarada en forma de ave fénix. ¿Qué mensaje quieren transmitir?
—Hemos querido expresar la forma de seguir yendo hacia arriba y seguir estando ahí para que la gente pueda encontrar siempre nuestra esencia.
—No obstante, en contraposición, el álbum cuenta con una pieza con aroma a despedida, ‘Llegó la hora’: «Llegó la hora, llegó el final, y los recuerdos no volverán».
—(Risas) Nada más lejos de la realidad. En este caso se trata de algo relacionado con el amor. Aunque entiendo que puede dar lugar a confusión, aclaro que hay Medina para rato.