El Ayuntamiento indemnizará a un atracador por el tiro recibido de la Policía
La sentencia confirma que intentó atropellar a los agentes pero le reconoce daños
El Ayuntamiento de La Carlota tendrá que indemnizar a un hombre condenado por un atraco cometido cuando intentaba desvalijar una empresa de ferretería de la localidad usando un coche de gama alta en 2015. El atracador recibió un disparo de la Policía Local cuando intentaba huir del lugar de los hechos en 2015. Son los daños provocados por ese disparo lo que van a generar la indemnización.
Lo curioso del caso es que la sentencia considera como hechos probados que el atracador intentó huir del lugar de los hechos, que no atendió a las órdenes policiales para que parase y que hizo caso omiso de un signo tan evidente como haber colocado el coche patrulla cruzado en la carretera. El coche de los atracadores aceleró con el objetivo de embestir a los agentes que tuvieron una situación de riesgo objetivo.
Ante el peligro inminente para sus vidas, los funcionarios de la Policía Local decidieron abandonar el vehículo. Cuando el coche de los atracadores pasó junto a su lado, uno de los agentes desenfundó el arma reglamentaria y disparó a una rueda. El proyectil impactó en la cabina del vehículo alcanzando al atracador, que se presentó por su propio pie en el Reina Sofía. El autor de los hechos tenía antecedentes.
La bala le generó una herida en el costado derecho, la laceró un riñón, peritonitis del duodeno por perforación. Conserva de la noche de los hechos una esquirla de la bala que no pudo ser extraída por los cirujanos, de tamaño milimétrico, más las consiguientes cicatrices desde el esternón hasta la zona supraumbilical. Fue condenado durante su convalecencia a delitos previos.
La sala de lo penal del Tribunal Supremo ha concluido el procedimiento de análisis del caso emprendido por el atracador contra el agente que le disparó. En principio, respalda casi todo lo dicho en fallo anterior por la Audiencia Provincial. Es decir, que el disparo fue legítimo, que el agente no hizo nada reprochable pero que hay que pagarle al atracador. La sentencia original identifica los hechos con un supuesto de imprudencia leve que no tiene consecuencias penales.
La Audiencia Provincial estableció una indemnización de algo menos de ocho mil euros como consecuencia de los daños sufridos a pesar de que se entendió que podía haber un supuesto de simulación. El atracador explicaba que la presencia de la esquirla del proyectil le había generado problemas intestinales. El Supremo establece un criterio distinto. Considera que, en la fase de ejecución de sentencia, se tiene que establecer un procedimiento contradictorio donde se presenten informes médicos suficientes para valorar el alcance final.