El Gobierno emplaza a la Junta a atajar unidos el suministro de agua
La ministra Ribera no aporta soluciones en una reunión con ediles afectados por la sequía
Ence construirá la planta de energía eléctrica de biomasa en el embalse cordobés de Puente Nuevo
Mucho ruido y pocas nueces. La visita de la vicepresidenta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, a los alcaldes del Valle del Guadiato, celebrada ayer en Espiel, sirvió de bien poco. Apenas para que la componente del gabinete de Pedro Sánchez les prometiese a los regidores que va a tratar de reunirse con el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, para buscar una solución al problema de la sequía y agilizar los mecanismos de potabilización de agua en la zona Norte de Córdoba. Diferentes regidores consultados por ABC durante la tarde, y que estuvieron presentes en el encuentro convocado para informarles de las iniciativas del Ejecutivo en relación a los fondos de la Transición Justa, coincidieron en que el nivel de concreción de Ribera en torno al problema del abastecimiento de agua en la zona septentrional de la demarcación fue más que escasa. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico no facilitó información alguna acerca del contenido de la reunión con los regidores. Este periódico trató sin éxito de que el Gobierno, a través de la Subdelegación en Córdoba, diera su versión acerca del encuentro de la ministra con los regidores del Valle del Guadiato.
Teresa Ribera tampoco ofreció novedades de calado en relación a la mejora de la potencia eléctrica en El Guadiato, y aportó —según los alcaldes consultados— el mismo horizonte temporal que ya era conocido: la intervención en la línea se consignará financieramente a partir de 2026. Hay que recordar que la nueva subdelegada del Gobierno en Córdoba, Ana López, señaló a mediados de este pasado mes de enero justo en esa fecha la acometida de la alternativa de duplicar la potencia de la línea de alta que entra hacia Peñarroya y Pozoblanco desde la subestación de Llerena pasando de 66 kilovatios a 132. La intervención es importante para la zona Norte de Córdoba, puesto que el Minsiterio de Transición Ecológica ha vuelto a desestimar las propuestas hechas por la Junta de Andalucía al nuevo mapa de redes de alta tensión para esta zona.
Recambios a la térmica
De otro lado, la filial energética de la papelera Ence, propietaria del líder europeo de venta de celulosa de eucalipto, estará en el gran proyecto energético del embalse de Puente Nuevo, en el término municipal de Espiel, que será uno de los recambios a la actividad tradicional de la térmica, cerrada por las políticas de descarbonización.
El dato, que no era conocido, aparece en la documentación que el Ministerio de Transición Ecológica remitió ayer a los medios con motivo de los avances en el concurso sobre el punto de Transición Justa. Un auténtico galimatías terminológico que se explica de forma un tanto más sencilla.
Al cerrar las centrales términcas y las últimas minas de carbón, hubo que buscar alternativas. Una de ellas son las energías renovables. Las térmicas tenían un activo relevante que es acceso a la red de alta tensión. Y en estos momentos, quien tiene donde volcar la red puede generar energía que, como está cara, supone un gran negocio.
En estos momentos, en Puente Nuevo hay un proyecto confirmado y otros por confirmar. El confirmado lo desarrollará la principal energética portuguesa, EDP, que anunció una macroinversión para convertir Puente Nuevo en una gran planta solar fotovoltaica que tendrá un parque de captadores flotantes de 50 Mw y otros 300 Mw en centrales fovoltaicas terrestres cercanas.