Hacienda exprime el auge de los estancos de la frontera con Francia
Este año autorizará un treintena de aperturas en la única zona donde crecen las ventas
Cada año que pasa se venden menos cigarrillos en España. La tendencia parece imparable y es muy acusada hasta el punto de que en 2023 se vendieron 110 millones de cajetillas de cigarrillos menos (a 20 unidades la cajetilla) que en el año 2018, según los datos oficiales que mensualmente ofrece el Comisionado del Mercado del Tabaco en sus informes de mercado.
Si esa caída no es mayor es porque hay un fenómeno que está sosteniendo las ventas de las expendedurías de unos años a esta parte pese al fuerte desplome de la demanda nacional. Se trata de las ventas turísticas y de frontera o dicho en otras palabras la demanda asociada a las visitas de ciudadanos extranjeros a España.
El informe de cierre de la situación del mercado de tabaco en 2023, recién publicado por el Ministerio de Hacienda, muestra una caída generalizada de las ventas de cigarrillos en todas las provincias de España –con una bajada media del 3% que llega a superar el 5% en algunas provincias–, con la única excepción de tres provincias: Gerona, Lérida y Guipúzcoa, donde los estancos vendieron más que en 2022, las tres con pasos fronterizos importantes hacia Francia.
Buceando un poco más en los datos del Comisionado, que discrimina entre consumo nacional y consumo turístico o de frontera, se aprecia que también en esas tres provincias el consumo nacional cayó como en el resto de España y que fueron las compras de extranjeros las que azuzaron los datos globales de ventas de cigarrillos.
En 2023 los consumidores nacionales adquirieron 66 millones menos de cajetillas respecto al año anterior, mientras que las ventas turísticas y en frontera (el 13% del total y creciendo) se incrementaron en tres millones, que se explican casi íntegramente por las ventas registradas en Gerona, Lérida y Guipúzcoa. La pujanza de este tipo de ventas y las subidas fiscales al tabaco son las que han permitido que pese a percibirse un caída de ventas del 6% en los últimos años los ingresos fiscales no solo no hayan caído sino que se hayan mantenido en el entorno de los 6.500 millones de euros.
Más estancos en frontera
De cara a 2024, Hacienda espera sacar una mayor tajada del cliente extranjero, una vez estén operativas las nuevas licencias de estancos que salieron a subasta en el último trimestre de 2022. Hasta 30 de los 203 nuevos permisos de expendeduría que sacó a la puja –tras 20 años sin conceder licencias–, fueron destinados a puestos fronterizos con Francia. Y el resultado fue todo un éxito para el erario público. En el concurso celebrado en el portal de subastas de Hacienda, la Agencia Tributaria recaudó 67,7 millones tan solo con esta treintena de nuevos locales. O lo que es lo mismo, el 70% de los 95,97 millones que se pagaron por todas las licitaciones en España.
Donde más sacó tajada Hacienda fue con diferencia en La Junquera (Gerona) uno de los puestos de más tránsito de mercancías entre España y Francia. Los diez locales sacados a subasta en esta ubicación dejaron en las arcas del Estado un total de 57 millones de euros y ninguna de las licitaciones bajó de los cinco millones. Incluso por uno de estos puntos de venta de tabaco se llegó a pagar siete millones.
El otro gran foco recaudatorio estuvo en Dantxarinea (Navarra) donde pujaron 5.145.000 euros por los cinco estancos subastados.
En la convocatoria de la subasta anunciada a finales de julio de 2022, Hacienda argumentó que para la elección de las localizaciones escogidas para la licitación se habían tenido en cuenta «criterios comerciales, de rentabilidad, de servicio público, de distancias entre expendedurías y de población».