«Algunos abandonan las zonas menos tractorables»
altasar García es uno de los miBles
de agricultores vinculados a la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en la provincia de Córdoba. Tiene su explotación en el término municipal de Adamuz, en una zona bastante complicada para su cultivo: el olivar en régimen de secano. «Cada vez hay más agricultores que tienen que arrendar o vender su explotación, aunque también hay quien tiene que abandonarlas por estar en zonas menos tractorables», reconoce en su primer testimonio a ABC Córdoba.
García desgrana muy bien los problemas que han llevado a sus compañeros a salir a las carreteras para demostrar su enfado con la situación que están viviendo. «El primer problema que tenemos es la climatología, ahora la sequía, pero siempre con la situación cada vez menos anormal de que lleguemos a 40 grados en marzo, florezca el fruto y luego haga frío y acabe con él».
Para este hombre de campo de toda la vida es suficiente el drama de la pérdida de un 70 por ciento de la producción respecto a la media habitual, aunque «el segundo motivo de las protestas es la subida de los costes de producción: el cobre ha pasado de 5,2 euros el kilo en 2020 a 8,05 en 2023, el abono de 0,35 a 0,75 con una subida del 111 por ciento y podemos seguir con el gasoil o la subida del SMI», desgrana.
Unión Europea
Baltasar García es contundente también sobre los problemas que vienen de Bruselas, de la Unión Europea. «Para cobrar la misma ayuda que en la PAC de 2022 ahora tenemos unos requisitos medioambientales que nos incrementan considerablemente los costes y que asume exclusivamente el productor cuando los beneficios medioambientales, que están muy bien, son para todos».
García, por último, apunta en declaraciones a ABC Córdoba que hay que corregir la situación de inmediato con «la entrada de productos de terceros países que no tienen los mismos controles sanitarios que nosotros tenemos que cumplir en España y que disponen de mano de obra más barata».