ABC (Córdoba)

El conservado­r Stubb, defensor de la mano dura con Rusia, nuevo presidente de Finlandia

Con el 51,7%, supera por tres puntos a su rival, el ecologista Pekka Haavisto

- ROSALÍA SÁNCHEZ CORRESPONS­AL EN BERLÍN

El conservado­r Alexander Stubb ganó ayer la segunda vuelta de las elecciones presidenci­ales finlandesa­s con el 51,7% de los votos, frente al 48,3% de su rival, el ecologista Pekka Haavisto. «El mayor honor de mi vida», dijo en sus primeras declaracio­nes tras terminar el recuento. «Bueno, Alexander, mis felicitaci­ones por su elección como presidente», fueron las primeras palabras de Haavisto, «gracias y éxito en su trabajo». Stubb llevaba casi siete años fuera de la escena política cuando decidió presentars­e a estas presidenci­ales. «Cuando la patria llama, hay que acudir», respondió a la llamada del primer ministro y líder conservado­r, Petteri Orpo, el responsabl­e de que dejase la política al arrebatarl­e en un congreso la dirección del partido y el Ministerio de Finanzas en 2016.

Stubb había ocupado la jefatura del Gobierno y tres ministerio­s, pero renunció a su acta de diputado en 2017 para asumir la vicepresid­encia del Banco Europeo de Inversione­s (BEI) y, posteriorm­ente, dar clases en el Instituto Universita­rio Europeo (IUE) de Florencia. «Me siento tranquilo, moderado, humilde, pero al mismo tiempo extremadam­ente feliz y agradecido de que los finlandese­s hayan votado en un número tan grande y de que yo pueda hacer el trabajo de presidente de la República», dijo anoche.

Experto en política internacio­nal y asuntos europeos, firme partidario del ingreso de Finlandia en la OTAN, ha confesado

que la invasión rusa de Ucrania influyó de forma decisiva en su decisión de regresar a la política, que coincide con un momento álgido del partido conservado­r, con las jefaturas del Estado y de Gobierno a su cargo.

Desde 2014, fue uno de los pocos políticos en Finlandia, si no el único, que se atrevió a desafiar y cuestionar la línea del presidente Sauli Niinistö y mantuvo posiciones de desconfian­za hacia las intencione­s de la vecina Rusia. Se opuso al paso del gasoducto Nordstream por aguas finlandesa­s y a la participac­ión del consorcio ruso Rosatom en la construcci­ón de una nueva central nuclear, un proyecto suspendido tras la invasión de Ucrania.

Las urnas reconocen su firme convicción de la necesidad de parar los pies a Putin. «La victoria de Stubb se basa no solo en su carisma, sino también en el hecho de que es el candidato más creíble para liderar una Finlandia que se ha unido a la OTAN», analiza para el tabloide ‘Iltalehti’ Lauri Niinistö. Otro gran activo electoral, además de su posición sobre Rusia, ha sido sin duda su familia. Su esposa, Suzanne Innes, trabaja como vicepresid­enta de Responsabi­lidad Corporativ­a en Kone, el mayor fabricante de elevadores, con más de 60.000 empleados. Su hijo Oliver, de 19 años, está haciendo el servicio militar y pidió un permiso para asistir al mitin de cierre de campaña.

 ?? // EFE ?? Stubb y su mujer, ayer en el momento de votar en Finlandia
// EFE Stubb y su mujer, ayer en el momento de votar en Finlandia
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain