El campo detecta desgaste en sus protestas, a las que no se unirá la pesca
Apenas una veintena de agricultores se manifestaron ayer en Mercamadrid
Las protestas de agricultores y ganaderos en España, que llevan en marcha desde hace más de una semana, comienzan a mostrar sus primeros síntomas de desgaste. Si el lunes eran los portavoces de la recién creada Plataforma 6F los que avanzaban un «cambio de estrategia» centrado en convocar manifestaciones en lugar de cortes de carretera, ayer la convocatoria de COAG, Asaja y UPA en las puertas de Mercamadrid hizo aguas.
La concentración en el que es el mayor distribuidor de frescos de España estaba prevista para medio millar de personas, según informaron en días anteriores las organizaciones agrarias. El objetivo era, al igual que trataron de hacer los agricultores franceses con el mercado de Rungis, hacer el mayor ruido posible en la capital y en la distribución alimentaria, después de que los dispositivos policiales hayan impedido durante estos días a los tractores bloquear los almacenes logísticos de los supermercados.
No obstante, pese a la intención de los convocantes, apenas una veintena de agricultores y ganaderos acudieron a la cita en Mercamadrid, a la que además no les permitieron acudir con tractores por ser una «infraestructura crítica». «Que no autorizaran los tractores desanimó a la gente. Después además nos dijeron que nos fuéramos a una puerta secundaria, así que ha terminado siendo una protesta pequeña», asumían desde UPA fuentes consultadas por ABC, que insistieron: «En Madrid hay muy pocos agricultores, cuando se llena es cuando viene la gente de otras partes de España».
Algo que ayer no pasó, en un día en el que las organizaciones citadas habían convocado protestas en casi una decena de lugares. «En Valladolid o Sevilla hay muchos más agricultores», explicaban los organizadores, que también sacaron los tractores a la calle también en Burgos, Cuenca, Guadalajara, Jaén, Málaga, Palencia, Santiago de Compostela, Toledo y el puerto de Motril (Granada). De hecho, en las provincias de Sevilla, Málaga y Jaén las protestas sí que causaron retenciones de hasta cinco kilómetros, mientras que unas 300 personas participaron en el bloqueo del puerto granadino.
La intención de las organizaciones agrarias es no obstante mantener su calendario de movilizaciones, que este miércoles ha incluido una nueva fecha, la del 26 de febrero. Ese día, COAG, Asaja y UPA llevarán sus protestas de nuevo a Madrid, coincidiendo con la reunión del Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea. «Todas las administraciones deben escuchar al campo e impulsar las reformas que demandamos», señalan los convocantes. Antes, estas organizaciones tienen convocadas más tractoradas en el puerto de Castellón (día 15); Alicante y Santander (26); Galicia, Asturias y Cantabria (20); Córdoba y Murcia (21); Aragón, el puerto de Algeciras y el puerto de Valencia (22); Gran Canaria y León (23); y Tenerife (24).
El sector pesquero espera
No contarán, sin embargo, con el refuerzo del sector pesquero para sus quejas, que estos días se planteaba sumarse a las protestas del campo.
Los socios de Cepesca, Fedepesca, las Cofradías de Pescadores y Apromar decidieron ayer, tras dos días de intensas reuniones y debates, no manifestarse con agricultores y ganaderos, algo que achacaron a que la decisión se ha tomado «teniendo en cuenta la diversidad de pesquerías y realidades de su cadena de valor».
El sector pesquero ha acordado así centrar sus reclamaciones de cara a las elecciones europeas del 9 de junio. No obstante, deja en manos de las asociaciones «la capacidad de acometer acciones», apelando «a la responsabilidad y a la no vulneración de los derechos de los ciudadanos».