Bruselas investiga a TikTok por su contenido adictivo para los menores
La Comisión estudia si la ‘app’ está incumpliendo la Ley de Servicios Digitales
La Comisión Europea anunció ayer que ha abierto una investigación a la red social de origen chino TikTok para determinar si se ha producido una infracción de la Ley de Servicios Digitales (DSA) en ámbitos vinculados con la protección de menores, la transparencia publicitaria, el acceso a datos para investigadores, así como a la gestión de riesgos de diseño adictivo y contenidos nocivos. La investigación formal sigue a un análisis previo que se produjo el otoño pasado y que terminó con un informe enviado por TikTok y cuyo contenido no ha sido considerado aceptable por la Comisión.
Según afirmó el jefe de Mercado Interior de la UE, Thierry Breton, en una publicación en su cuenta oficial de X, la Comisión «sospecha» que la aplicación, que cuenta con unos 136 millones de usuarios en suelo comunitario, no está cumpliendo con la normativa a la hora de controlar que su funcionamiento no sea adictivo para los más pequeños. Esta también estaría fallando a la hora de verificar la edad de los internautas. «Hoy (por ayer) iniciamos este procedimiento de infracción formal para garantizar que se tomen medidas proporcionadas para proteger el bienestar físico y emocional de los jóvenes europeos. No debemos escatimar esfuerzos para proteger a nuestros hijos», declaró Breton.
La Ley de Servicios Digitales, que acaba de entrar en funcionamiento en la UE hace escasos días, establece obligaciones para los operadores relacionadas con la evaluación y mitigación de riesgos sistémicos. Aquí se incluyen los sistemas algorítmicos, que pueden llegar a estimular adicciones, algo que la Comisión considera especialmente peligroso en el caso de los menores que pueden ser víctimas de elementos radicalizadores.
Para Bruselas, los medios que usa TikTok para reducir estos riesgos, en particular las herramientas de verificación de edad utilizadas para impedir el acceso de menores a contenido inapropiado, no parecen ni apropiadas ni efectivas. La Comisión tampoco está de acuerdo con el hecho de que la red social no le ha dado a los investigadores acceso a los datos de acceso público, según lo dispuesto la legislación.
La red social china ha afirmado, al respecto del inicio de la investigación, que piensa trabajar con los expertos y la industria para mantener seguros a los jóvenes en su plataforma y que tiene intención de explicar este trabajo en detalle a la Comisión Europea. «TikTok ha sido pionero en funciones y configuraciones para proteger a los adolescentes y mantener a los menores de 13 años fuera de la plataforma, problemas con los que toda la industria está lidiando», dijo un portavoz de la aplicación.
Posible multa económica
La apertura de una investigación no presupone cuál va a ser su resultado. A partir de ahora, la Comisión seguirá reuniendo pruebas con solicitudes adicionales de información o inspecciones. Bruselas también está facultada para aceptar cualquier compromiso asumido por TikTok de subsanar las cuestiones objeto del procedimiento, que no tiene un plazo legal para sustanciarse.
Cabe recordar que la DSA obliga a los mayores emporios digitales que operan en suelo comunitario a levantar salvaguardas adicionales para proteger a los usuarios y a realizar movimientos que faciliten la competencia. La aplicación china presentó hace unos meses un recurso ante el Tribunal General de la UE con el que pretendía evitar cumplir con algunas de las obligaciones que recoge la normativa y que obligarían a la empresa a desvelar cómo perfila a los usuarios con fines comerciales. Terminó siendo desestimado.
En caso de que la Comisión, en base a la investigación, entienda que TikTok ha quebrantado la normativa, la red social puede ser multada con el 6% de sus ingresos anuales a nivel global. En caso de reincidencia, Bruselas incluso puede terminar prohibiendo a la plataforma operar en suelo comunitario. Algo que supondría un golpe importante para la ‘app’, que lleva tiempo en el punto de mira de reguladores de todo el mundo.
La red social puede ser multada con el 6% de sus ingresos anuales globales. Si reincide, corre el riesgo de ser prohibida en la UE