El Bellas Artes prepara una muestra sobre los retratos de Mateo Inurria
▶ Incluirá esculturas, pero también fotografías y dibujos de sus obras
El Museo de Bellas Artes de Córdoba, gestionado por la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, se sumará a la programación del centenario de la muerte del escultor cordobés Mateo Inurria (1867-1924) con la exposición ‘Mateo Inurria. Retratos’, una muestra en la que, a través de 29 esculturas y una serie de fotografías y dibujos, se analizará el retrato en la producción del artista.
La exposición, que podrá visitarse a partir del 11 de junio, reúne una selección de las mejores obras del escultor de los fondos de la pinacoteca cordobesa, institución que alberga la mayor colección existente de esculturas, dibujos y otros enseres de Inurria, de cuyo fallecimiento se cumplen mañana años. Coincidiendo con esta efeméride la pinacoteca cordobesa ha programado la primera exposición sobre esta temática del escultor.
La propuesta expositiva del Bellas Artes gira en torno al retrato, a cómo el rostro humano está presente en la obra del escultor, tanto en piezas escultóricas como en dibujos o instantáneas. Junto a las veintinueve esculturas, se mostrarán fotografías referidas a obras cuyo paradero es desconocido o forman parte de monumentos conmemorativos, lo que hace imposible su presencia. La mayoría de estas imágenes pertenecen al archivo personal de Inurria.
Temas
Comisariada por Ramón Montes, uno de los mayores especialistas en la obra del escultor, en ‘Mateo Inurria. Retratos’ las piezas se articularán en cuatro en cuatro bloques temáticos. En el apartado ‘Tipismo’ se exhibirán piezas como ‘Busto de Lagartijo’ (1903), ‘Gitana’ (1911) —la última adquisición del escultor en el Bellas Artes de Córdoba— o ‘Lobo de mar’ (1903), esculturas que presentan características antropológicas singulares, tanto etnográficas como laborales.
En el apartado de ‘Idealización’ se mostrarán nueve esculturas y diez fotografías en las que Inurria refleja personajes idealizados, ya sea por referirse a personajes históricos —‘Cabeza del Gran Capitán’ (1915), ‘Busto de Séneca’ (1885)—, religiosos —‘Busto del Cristo del Perdón’ (1923)— o representativos de valores estéticos —‘Ensueño’ (1922) o ‘Sensualidad’ (1915)—. En ‘Retratos personales’, el más numeroso de los cuatro bloques, se exhibirán trece esculturas y cinco fotografías, que responden a personalidades concretas, desde su círculo personal hasta personajes de la política, la tauromaquia, la literatura o el periodismo. La muestra ofrece además, una interesante colección de fotografías sobre ‘Retratos en los monumentos’, el último bloque temático, en el que se incluirán dos esculturas: ‘Cabeza del Gran Capitán’ (1915), en mármol blanco, y el busto de Eduardo Rosales (1922), en yeso satinado.