El Premio Gran Capitán
El significado del premio busca reconocer al cordobés que haya triunfado fuera de nuestra tierra
El pasado miércoles tuvo lugar, en la renacentista Sala Orive, la entrega pionera de un galardón que nace con vocación de continuidad y prestigio, el Premio Gran Capitán, instituido por el diario ABC para reconocer a un cordobés que haya triunfado allende Córdoba. El primer ganador, sin duda merecido, ha sido Santiago Muñoz Machado. Nacido en Pozoblanco y con gran vinculación con esta localidad de los Pedroches, da la casualidad de que el próximo 28 de febrero será nombrado Hijo Predilecto de Andalucía. Un acto social arropó la entrega del premio, que contó con el patrocinio del Ayuntamiento de Córdoba y Caixabank.
Todo premio tiene tres componentes principales: el nombre del premio, el nombre del ganador y el significado del galardón. El Premio Gran Capitán hace referencia a Gonzalo Fernández de Córdoba (Montilla, 1453-Granada, 1515), militar y diplomático al servicio de España y de los Reyes Católicos. Fue el primer general de la Historia Moderna: por su lealtad absoluta a la Monarquía hispana, a pesar de los ofrecimientos que le llegaron de otros estados; por su estrategia bélica que dio la supremacía a la infantería y al fuego de arcabuces frente a la caballería feudal, inaugurando la época de invencibilidad de los tercios; y por su habilidades diplomáticas y cortesanas en Granada y en Italia. Sus hombres le apodaron ‘El Gran Capitán’ y ha pasado a la historia como un gran general, un hombre de honor, de lealtad y de humanidad.
El ganador fue Santiago Muñoz Machado, cuyo prestigio está fuera de toda duda, actual director de la Real Academia Española, catedrático de Derecho y escritor. Acertó el jurado, porque los premios prestigian al ganador, pero también los ganadores prestigian al premio. Y más aún si los galardones son pioneros, como este es el caso: «Pensar que pueda sumarse mi contribución de jurista y académico es un acto muy generoso. Es una celebración de la excelencia que acogerá a otros profesionales del saber y de la economía de la provincia de Córdoba», manifestó en su discurso.
El significado del premio busca reconocer al cordobés que haya triunfado fuera de nuestra tierra. Una tierra poco dada a reconocer a sus hijos ilustres, como si fuera marca de la casa, a los que exige que muestren y demuestren su grandeza y, por supuesto, alcancen el éxito lejos de aquí. Y eso que no han faltado cordobeses que, de haber existido este premio siglos atrás, lo habrían ganado: el propio Gran Capitán, Séneca, Osio, Averroes, Maimónides, Leonor López de Córdoba, Beatriz de Arana, Góngora, Juan de Mena, Juan de Mesa, el duque de Rivas, Juan Valera, Julio Romero de Torres, Mateo Inurria, Manolete o Rafael de la Hoz. Córdoba ha escrito páginas brillantes en la historia también a través de sus hijos. Bienvenido y larga vida a este premio que sirva de acicate y memoria para los cordobeses.