El coste de gasoil para llevar agua al Norte se eleva ya a 4 millones
▶ La Diputación comienza a instalar los equipos que tratarán el agua del embalse
El despropósito de la obra de emergencia de la conexión entre el embalse de La Colada y el de Sierra Boyera ha costado cuatro millones de euros a la Diputación de Córdoba en los gastos de combustible necesario para el funcionamiento del bombeo de un pantano a otro y también en los camiones cisterna que cada día llevan el agua potable a los 24 municipios de Los Pedroches y el Guadiato que no disponen de ella desde abril.
Diez meses sin agua potable en los grifos del Norte de Córdoba han creado un agujero difícil de sostener a las arcas de la Diputación, especialmente a las de la Empresa Provincial de Aguas (Emproacsa).
La institución, a pulmón, tiene que hacer frente a los gastos del gasoil. La empresa pública está al borde de la quiebra, con 300 trabajadores, por el exceso de coste, entre otros, asumido para llevar el agua potable en camiones cisternas a los municipios afectados.
La Diputación y Emproacsa han tenido que hacer frente a un gasto millonario en 2023. En concreto, la institución ha hecho frente a un coste de 1,5 millones de euros para financiar el gasoil para tener activo el bombeo de La Colada a Sierra Boyera.
El coste de las cisternas de agua potable que abona la empresa pública ha alcanzado la friolera de 1.647.000 euros. A estos gastos hay que añadirle también 156.000 euros del canon de la CHG, así como la necesidad de una partida de 300.000 euros para pagar al personal específico contratado para estas nuevas tareas.
Según los datos facilitados a ABC, el gasto acumulado en gasoil para el bombeo y para las cisternas de agua potable en el Norte de Córdoba ha llegado a 3,6 millones de euros en 2023.
Sin embargo, la Diputación tiene ya en licitación un nuevo contrato para el suministro de gasoil, pero que irá destinado a la partida de gastos de 2024. Este contrato tiene un valor de licitación superior a otro medio millón de euros. Sólo dará soporte para dos meses más.
Con suerte, será suficiente para que el agua potable haya vuelto a las viviendas del Guadiato y Los Pedroches. Los 3,6 gastados en 2023 y los 0,5 millones previstos ya para 2024 elevan la factura del gasoil para el bombeo de La Colada y de las cisternas de agua
potable a algo más de 4 millones de euros.
Este importante gasto ha obligado a la Diputación a tener que realizar una importante subida en las tarifas del consumo de agua de Emproacsa para este año, así como también de los precios de la recogida de residuos de Epremasa.
Actuaciones en marcha
Entretanto, la Diputación prosigue con el proyecto para que el agua potable llegue de nuevo a los 80.000 vecinos afectados. Así, la institución provincial informó ayer de que han dado ya comienzo a los trabajos necesarios para la instalación de los equipos de generación y dosificación de dióxido de cloro en el depósito de Cuartanero, donde el preciado líquido que llega desde La Colada será tratado en un primer momento.
El presidente de la institución provincial, Salvador Fuentes, informó de
que «el agua pasará a la ETAP de Sierra Boyera con un primer tratamiento y en condiciones de seguir siendo acondicionada». «Es un paso muy importante para lograr su potabilización en la zona Norte de Córdoba».
Los trabajos, que desarrolla la empresa Aplicor, consisten en la instalación de una losa de hormigón sobre la que irán unas naves que van a albergar los equipos de dosificación de dióxido de cloro. Se trata de una obra muy compleja porque en la zona no hay abastecimiento eléctrico y, por tanto, el proyecto conlleva una instalación de placas solares.
El máximo representante de la Diputación recordó que «este trabajo se complementa con el resto de actuaciones previstas», que son la disposición de un sistema de ultrasonidos para evitar la proliferación masiva de algas que se da en La Colada, de manera que se reduzca la materia orgánica del líquido cuando llegue a Cuartanero (donde se va a instalar el mencionado sistema de dosificación de dióxido de cloro); la instalación de cubiertas localizadas y un sistema de clarificación por flotación en la planta de Sierra Boyera y la auditoría de pérdidas en las conducciones entre La Colada y Sierra Boyera.
Salvador Fuentes indica que la instalación de los equipos de cloro es «un paso muy importante» para potabilizar el agua