Puente Genil, el epicentro nacional de las bolilleras
La ciudad pontanesa acoge el XX Encuentro Nacional de Encajeras de Bolillos, con 634 bolilleras inscritas en esta ocasión, lo que dobla la participación respecto a la anterior edición y consuma el éxito de esta iniciativa
Eencaje de bolillos es, sin duda alguna, un arte milenario que ha perdurado a través de los siglos. Entre sus responsables, la asociación de Mujeres María Górriz de Puente Genil ha contribuido a ello, por ser un colectivo dedicado a rescatar oficios y antiguas tradiciones.
Precisamente, el encuentro que organizan en la localidad pontana, a nivel nacional y de forma anual, ha batido récord de participación en su vigésima edición, pues con 634 bolilleras inscritas, más sus acompañantes, procedentes de 35 municipios de todas las provincias andaluzas y algunos puntos de la geografía española como Ciudad Real (Castilla La Mancha), ha doblado la participación del pasado año.
«Estamos hablando de todo un ejemplo de convivencia de primer nivel en toda Andalucía», según apuntó ayer el alcalde, Sergio Velasco, que felicitó al colectivo por su trabajo en la promoción de Puente Genil con esta iniciativa, que sirve año tras año como punto de encuentro para intercambio de experiencias entre las bolilleras, con el aprendizaje y la difusión de nuevas técnicas artesanas.
Cerca de un millar de participantes acudieron a este encuentro nacional en la localidad pontana, celebrado por primera vez en el patio del IES Manuel Reina y reuniendo a 18 puestos expositivos, procedentes de Barcelona o Alicante, entre otros. «Lo que más se suele vender son varillas para hacer abanicos», según apuntan desde el puesto de Rosa María Jordá, procedente de Montserrat (Barcelona), que no dudan en afirmar que «el encuentro de encajeras de Puente Genil es de los más importantes de la provincia de Córdoba». Lo cierto y verdad es que esta técnica de encaje textil, que consiste en entretejer hilos que inicialmente están enrollados en bobinas llamadas bolillos, son un autentico vicio y sirven de terapia de relajación para aquellas que lo practican.
A media mañana, el encuentro de bolilleras en Puente Genil se vio afectado por las inclemencias meteorológicas, teniendo que habilitarse, de manera coordinada, el salón de actos del centro educativo, para que los asistentes pudiesen estar a cubierto.
Las bolilleras
Teresa Guzmán fue una de las bolilleras que acudió a este encuentro procedente de Alhaurín El Grande, para exponer sus labores, junto a las más de un centenar de alumnas que alberga la asociación de esta localidad. «Hay mucha afición al bolillo hoy en día y prueba de ello son la cantidad de encuentros que se organizan, tanto a nivel nacional como internacional», apunta Teresa, que explicó a este periódico las diferentes técnicas que existen de este arte, siendo la «popular la que más se practica en nuestro país».
Leandra Alarcón, monitora del taller del encaje de bolillos en Puente Genil con cerca de una quincena de alumnas, se considera una auténtica amante del bolillo desde hace 22 años, técnica que aprendió junto a su hermana desde pequeña.
Abanicos, tocas, toallas, tapetes, chal, ligas y pañuelos, son algunas de las labores que, con mucho tiempo y paciencia, se pueden realizar con el encaje de bolillos, cuyo origen y según apuntan historiadores, se fija a mediados del siglo XVI en Venecia.
El evento se vio afectado por la lluvia y la organización trasladó los expositores al interior de un centro educativo