Las cargas policiales a agricultores el 20-F enfrentan a PSOE y PP
Hurtado dice que se creó un problema «de orden público» y Torrico replica que «le vino grande a alguien»
El momento más tenso del Pleno ordinario de marzo del Ayuntamiento de Córdoba se vivió ayer al filo de las cinco horas de la sesión, cuando saltó al terreno de juego de Capitulares la carga policial a los agricultores en la manifestación del pasado 20 de febrero en Córdoba. La polémica estalló en un debate político entre acusaciones cruzadas del PSOE y el PP.
El portavoz del grupo municipal socialista, Antonio Hurtado, encendió la mecha en una pregunta al alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), sobre este asunto, que tuvo ya una primera entrega el día después de aquella jornada cuando Torrico acusó de que la intervención policial fue «una decisión política» y la subdelegación aseguró que se denegó la autorización a la marcha de los tractores por la ciudad tras un informe negativo de la Policía Local.
Hurtado, visiblemente irritado, afirmó ante la Corporación Municipal que el PP, con su actitud, creó «un grave problema de orden público». El responsable de los socialistas recriminó al alcalde que
«no tuviese tiempo para atender la llamada de la Subdelegación» para consensuar una actuación ante la intención de los agricultores de realizar una marcha simbólica con los tractores por la capital que no estaba autorizada por el Gobierno de España.
El portavoz del Partido Popular, Miguel Ángel Torrico, en una pregunta socialista que perdió su sentido para acabar por convertirse en un debate fuera del espacio destinado a ello en el Pleno, le contestó que el problema real que motivó las cargas es que la gestión de esta situación de crisis quizás «le vino grande a alguien», en alusión a la recién nombrada subdelegada del Gobierno en Córdoba, Ana López, a la que no nombró expresamente durante su intervención. Además, Bellido contestó a Hurtado que «el jefe de gabinete de la Subdelegación lo que me comunicó es que la subdelegada me llamaría, pero no lo hizo; y ella tiene mi teléfono igual que yo tengo el de ella», para aclarar quien no realizó el contacto telefónico para dialogar sobre esta cuestión.
El alcalde también añadió que «prefiero tener un problema de tráfico» si se hubiera autorizado la marcha de los tractores por la ciudad «que un problema de orden público», como sucedió por no autorizar la marcha de los agricultores, que fueron detenidos con una carga por la Policía Nacional en la Ribera.
Además, Bellido recordó a Hurtado que «si tanta preocupación tiene usted por la coordinación y la seguridad le recuerdo que el 3 de marzo se celebró otra protesta de los agricultores y ya no hubo ningún problema».