El Imibic investigará nuevos tratamientos contra un tumor raro
La Asociación contra el Cáncer dedica 300.000 euros a buscar cura para el oligodendroglioma
También en el cáncer hay enfermedades raras. Son tumores con una incidencia tan baja que además de perjudicar a quienes los padecen dificultan la investigación y el hallazgo de medicamentos y terapias que les pongan fin. El Instituto de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic) está a punto de trabajar con uno de ellos.
Como explicó ayer el subdirector del Imibic, Raúl Luque, investigador principal del proyecto, el tumor que se va a estudiar se llama oligodendroglioma, y es «una patología cerebral muy rara, que proviene de unas células muy específicas», que son los oligodendrocitos. «Creemos que no hay ningún proyecto a nivel mundial que trate esta patología», resaltó ayer en la presentación. Se hará con una beca de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), con una dotación de 300.000 euros que se prolongará durante tres años. Los pacientes tienen unos síntomas severos: epilepsia, fuerte dolor de cabeza y trastornos cognitivos.
Es especialmente dolorosa por darse casi siempre en personas jóvenes: la mayoría entre los 35 y los 44 años de edad. «Afecta a los pacientes y a su entorno familiar, en un momento en que tienen hijos pequeños. Están desesperados, porque les corta la vida», resumió Raúl Luque. Su incidencia es baja: un paciente por cada 100.000 habitantes. La terapia actual es cirugía, quimioterapia y radioterapia. Es limitada, porque «disminuye mucho la esperanza y la calidad de vida», aunque su mortalidad no es demasiado alta: la supervivencia llega al 75 por ciento de los casos.
El proyecto quiere obtener muestras de los pacientes «para analizar
desde el punto de vista molecular y celular algunos componentes que creemos que pueden ser dianas terapéuticas y biomarcadores de diagnóstico y pronóstico». Es decir, en qué punto se puede tratar y estudiar.
Para hacerlo, los investigadores utilizarán muestras cedidas por los mismos pacientes, extraídas de la cirugía, y se buscará «algún fármaco o tratamiento para curar o aumentar la calidad de vida de los pacientes». El proyecto comenzó con un paciente de Córdoba y de ahí nació un proyecto «multicéntrico y multidisciplinar». No en vano, participan neurólogos, neuropatólogos y profesionales de todos los hospitales andaluces o del Doce de Octubre de Madrid, «que es de los pocos que estudia esta patología en España». Esto permitirá «analizar más de cien muestras recopiladas, que es importante para una patología rara».
Las esperanzas de dar con un buen resultado son altas, porque parten de una hipótesis que puede ser muy productiva: «Con datos preliminares consideramos que podemos encontrar una diana terapéutica, y el siguiente paso sería buscar un fármaco, para lo que ya estamos en contacto con algunas empresas».